ACTOR, DIRECTOR, PRODUCTOR Y GUIONISTA, FUE UNA PERSONA ENTRAÑABLE, DIRECTOR DE LA FILMOTECA EN SUS AÑOS DE MAYOR ESPLENDOR

La Academia de Cine informa del fallecimiento a los 98 años de Florentino Soria, actor, director y guionista. Fue subdirector general de cinematografía y director de la entonces Filmoteca Nacional en sus años de mayor esplendor, desde el 17 de noviembre de 1970 al 23 de marzo de 1984. También fue profesor de Historia del Cine en los primeros años de la Facultad de Ciencias de la Información de Madrid.

Soria era una persona entrañable, nacido en Gijón en 1917, participó en guiones de películas como «La cera virgen», «La orilla», «Reza por tu alma… y muere», «El otro árbol de Guernica», «La banda de los ocho», «El vagabundo y la estrella» o «La vida alrededor», entre otras.

Además, apareció como actor en películas dirigidas por Luis García Berlanga, entre las que detacan «La escopeta nacional» (1977), «Nacional III» (1982) y «Moros y cristianos» (1987), así como en la serie televisiva de Javier Maqua «Muerte a destiempo», entre otras.

Florentino Soria ingresó en 1947 en el recién creado Instituto de Investigaciones y Experiencias Cinematográficas (IIEC) para estudiar realización y en esta escuela de cine dirigió cuatro cortometrajes y dio clases como profesor de guión.

Profesor de Historia del Cine en la Facultad de Ciencias de la Información de la Complutense y promotor del Primer Congreso de Cineclubes del estado español, fue guionista en numerosas películas, entre las que destacan sus colaboraciones con Carlos Serrano de Osma («Cerco de ira»), Luis G. Berlanga («Calabuch»), Fernando Fernán-Gómez («La vida alrededor»), Pedro Lazaga («El otro árbol de Guernica») o José María Forqué («La cera virgen»). En 1961 obtuvo el premio del Sindicato Nacional del Espectáculo por el guión titulado «El rey Baltasar» (escrito junto a Leonardo Martín y Joaquín Gurruchaga), filmado y estrenado luego como «El hombre del Expreso Oriente» (F. Borja Moro).

Con la llegada de José María García Escudero a la Dirección General de Cinematografía, en julio de 1962 fue nombrado subdirector general del organismo, y desde allí jugó un papel fundamental para impulsar el Nuevo Cine Español, poniendo en marcha un amplio programa reformista de corte liberalizador (reorganización de la Junta de Clasificación, un nuevo sistema de protección, implantación de las nuevas normas de censura, creación de las salas de Arte y Ensayo, etc.).

Nombrado Director de la Filmoteca Española en noviembre de 1970, cargo que ocupó hasta 1984 y desde el que impulsó numerosos ciclos en los que podían verse películas entonces prohibidas por la censura para su exhibición comercial, Soria también trabajó como crítico y especialista de cine; publicó libros sobre José María Forqué y Juan Mariné; y fue un ocasional secundario de lujo en películas de Berlanga («La escopeta nacional», «Nacional III», «Moros y cristianos»), Álex de la Iglesia («Muertos de risa»), La Cuadrilla («Atilano, presidente») e Icíar Bollain («Mataharis»).

Soria fue reconocido con una de las 46 Medallas de Oro que otorgó la Academia de Cine con motivo del primer centenario del cine español. También fue destinatario de la Medalla Honorifíca que concede la Asociación Española de Historiadores del Cine, y era académico supernumerario de la Academia de Cine.