Intérpretes
Sinopsis
Carrie White (Chloë Grace Moretz) es una chica que cursa sus tres últimos meses de su último año en la Preparatoria Ewen en Chamberlain. Un día, mientras se baña en las duchas de la escuela, tras la clase de gimnasia, Carrie tiene su primer periodo. Siendo totalmente ignorante acerca de la menstruación, piensa que está desangrándose y se aterroriza. Las otras chicas se ríen de ella y la humillan arrojándole tampones y toallas femeninas. Una de las chicas, Christine Hargensen (Portia Doubleday), quién tiene fama por acosar a Carrie desde hace tiempo (sexto año), graba el suceso y más tarde lo publica en YouTube. La Profesora de gimnasia, Rita Desjardin (Judy Greer), llega a las duchas, calma la situación y consuela a Carrie llevándola a su oficina. La profundamente religiosa madre de Carrie, Margaret (Julianne Moore), es llamada por teléfono para recoger a Carrie temprano. Al llegar a casa, creyendo que el periodo de su hija es un «pecado», Margaret la encierra en un armario para que rece y pida perdón a Dios. Carrie grita con desesperación para salir, y repentinamente se hace una gran grieta en la puerta. Ambas quedan totalmente sorprendidas con esto, y Carrie se da cuenta de que tiene poderes telequinéticos. El día siguiente, Desjardin les informa a las chicas que humillaron a Carrie, que tendrán que permanecer el resto de la semana en detención. De lo contrario, serán suspendidas tres días y se les negará el acceso al baile de graduación. Christine, creyendo que no ha hecho nada malo, se niega a acatar órdenes de Desjardin (asistir a detención) y llama a su padre, abogado, para que arregle el asunto con el director de la escuela, y así poder presentarse en baile escolar. Cuando el padre de Christine amenaza a la escuela con demandarla, Desjardin revela que alguien (probablemente Christine) subió un vídeo a Internet en el que se muestra a Carrie siendo humillada. El padre de Christine le pide su teléfono a esta para comprobar su inocencia, pero Christine solo sale rabiosa de la oficina. Carrie investiga sobre la Telekinesis en internet y aprende a usar sus habilidades. Sue Snell (Gabriella Wilde), una de las chicas populares que participó en el incidente de las duchas, se siente muy culpable por lo que hizo, y tratando de arreglar las cosas, le pide a su novio atleta, Thomas Ross (Ansel Elgort), que lleve a Carrie al baile, con el fin de que ésta pueda pasar un buen rato. Cuando Thomas le pregunta a Carrie, ésta se muestra primero sorprendida, creyendo que es solo otra broma, pero más tarde acepta la invitación. Carrie le informa a su madre que ha sido invitada, pero Margaret se niega a darle permiso para asistir. Carrie manifiesta su poder frente a su madre y ésta cree que su hija ha sido poseída por el demonio mismo. Christine, su novio Billy Nolan (Alex Russell), y otros chicos más, irrumpen en una granja por la noche, para asesinar un cerdo y vaciar su sangre en una cubeta de metal. Después entran a la escuela, y colocan la cubeta en una viga por encima de los tronos que serán respectivamente del rey y reina del baile. En la noche del baile, Margaret intenta convencer a Carrie de que se quede en casa, pero ésta la encierra en el armario y se retira. En el baile, Carrie y Tommy son nombrados rey y reina del baile, ya que la mejor amiga de Christine, Tina (Zoë Belkin), quien falsificó los votos como parte del plan. Sue se entera de la humillación que Carrie está a punto de sufrir, por lo que maneja a la escuela y llega justo antes de suceda. Desjardin ve a Sue y creyendo que planea humillar a Carrie, la echa del baile por la fuerza. Christine arroja la sangre de cerdo sobre Carrie, humillándola frente a toda la escuela, una vez más. Carrie, avergonzada, trata de abandonar el escenario cuando la cubeta de metal cae sobre Thomas, golpeándole la nuca, matándolo. Carrie furiosa, desesperada y llena de rencor, cierra todas las puertas del gimnasio y comienza a matar personas. Las únicas personas que logran escapar son: Christine y Billy, Sue, Desjardin y unos pocos estudiantes más. Carrie deja el gimnasio, ahora incendiado y lleno de cadáveres y se dirige a su casa. En el camino, va destruyendo todo a su paso, y se topa con el auto de Billy y Christine, quienes intentan atropellarla, pero Carrie detiene el auto, lo hace levitar y asesina violentamente a ambos. Al llegar a casa, se da un baño para quitarse la sangre de encima y su madre la encuentra. Margaret consuela a su hija y cuando se arrodillan para rezar, Margaret toma un cuchillo y apuñala a su hija en el hombro. Carrie cae de las escaleras, debilitada. Margaret se prepara para dar el golpe final, pero Carrie la arroja contra el muro, y la «crucifica» ahí, clavándole objetos filosos en el pecho y estómago. Tras darse cuenta de sus actos, Carrie hace llover piedras del cielo, y su casa comienza a destruirse. Inesperadamente llega Sue, y Carrie, furiosa, la sujeta con sus poderes y le pregunta la razón por la que la humillaron de esa manera en el baile. Sue le muestra su mente a Carrie, revelándole que no tuvo nada que ver con lo ocurrido. Carrie le dice a Sue que su bebé es una niña, y la arroja fuera de la casa para que no sea aplastada. Sue queda totalmente sorprendida por el hecho de que Carrie supiera que su bebé era una niña, cuando ni ella misma sabía que estaba embarazada. Durante un «voice-over» del testimonio que Sue da al jurado sobre los hechos del baile de graduación, se muestran imágenes de ésta acercándose a la tumba de Carrie, que ha sido saqueada con las palabras «Carrie White arderá en elinfierno”. De pronto la tumba se agrieta, indicando que Carrie podría seguir viva.
