Titulo original: Strákarnir okkar
Año: 2005
País: Islandia – Finlandia – Gran Bretaña
Duración: 90 min
Dirección: Róbert I. Douglas
Guión: Róbert I. Douglas y Jón Atli Jónasson
Música:
Barði Jóhannsson y Mínus
Intérpretes
Björn Hlynur Haraldsson, Lilja Nótt Þórarinsdóttir, Arnaldur Ernst, Damon Younger, Nanna Ósk Jónsdóttir, Helgi Björnsson, Sigurður Skúlason, Þorsteinn Bachmann, Björk Jakobsdóttir, Pattra Sriyanonge, Marius Sverrisson, Hilmar Jonsson, Pétur Einarsson, Felix Bergsson, Erlendur Eiríksson, Jón Atli Jónason, Valdimar Örn Flygenring, Davíð Guðbrandsson, Jóhann G. Jóhannsson, Magnús Jónsson, Stefán Jónsson, Ingvar Þórðarson, Ingibjörg Reynisdóttir, Jón Jósep Snæbjörnsson, Ívar Örn Sverrisson, Viðir Guðmundsson, Ísgerður Elfa Gunnarsdóttir y Lilja Guðrún Jónsdóttir.
Premios
Seleccionada para la Sección Panorama del Festival de Berlín
Sinopsis
Ottar Thor (Björn Hlynur Haraldsson) es una estrella del fútbol islandesa muy querida en su país, guapo, arrogante, que tras ganar un partido le dice de forma casual a un periodista que es gay. Las sorpresas de su ex mujer, antigua Miss Islandia, la de su hijo adolescente, hosco y atormentado y la de su padre, que además es su entrenador y director del equipo, no tienen límite. Thor es expulsado de su equipo, el KR (Reykjavik FC), donde se supone que todos los jugadores son heterosexuales. Sin embargo, le ofrecen un puesto en un equipo modesto de homosexuales, en el que todos los jugadores son simplemente aficionados pero otra vez tiene que hacer frente a la homofobia de los equipos adversos. Su padre quiere que su hijo vuelva al KR, a condición de que vuelva a ser heterosexual, mientras que todos los gays de Islandia quieren jugar en el equipo de Thor. Entonces Ottar impone una condición un poco rara…
Comentario
Comedia islandesa con algunos aspectos dramáticos, que denuncia la homofobia, en torno al alboroto que provoca la aparición de un club de fútbol sólo para homosexuales, en el que jugará el futbolista más famoso del país tras ser expulsado, por gay, del equipo en el que militaba. Es la cuarta película del director islandés Ròbert I. Douglas (“The Icelandic Dream”), uno de los pocos directores de su país con trascendencia internacional, que aquí también ejerce de coguionista y montador.