una emotiva biopic del cantante franco belga Rocco Granata

El belga Stijn Coninx («Sor Sonrisa») ha presentado en la 58 edición de la Seminci vallisoletana «Marina», una emotiva biopic del cantante fanco belga Rocco Granata, que dió la vuelta al mundo a finales de los años 50 con su éxito «Marina». La historia de un joven emigrante italiano en Bélgica, destinado como su padre a trabajar en las minas del carbón, pero que supo aprovechar la oportunidad que se le presentó como cantante.

Protagonizada por Matteo Simoni, Evelien Bosmans y Luigi Lo Cascio, la película se inicia en Italia en 1948. Rocco, un niño de 10 años crece en una preciosa aldea de la montaña calabresa hasta que un día su padre, Salvatore, decide emigar en busca de un futuro mejor.Como tantos miles de italianos emigra a Bélgica para convertirse en minero, y poco después se lleva a su mujer y a Rocco con él. Los grises paisajes mineros de Limburgo, los gélidos inviernos y un invierno y una cultura extraños caen como un jarro de agua fría sobre la existencia, hasta entonces feliz, del pequeño Rocco. A pesar de todo, él está empeñado en ser como los demás chicos de su edad y tener un objetivo en la vida. Contrariando los deseos de su padre y su propio sentido común, busca una vía de escape en la música y en el amor. Rocco sigue los destinos de su corazón y se entrega a su pasión en pos de un sueño.
Stijn Coninx, junto con el actor Matteo Simoni, hizo una valoración de su película, «Marina», en una rueda de prensa que tuvo lugar en la Sala de los Espejos del Teatro Calderón. El director destacó de esta historia que un joven pasa, de la noche a la mañana, de no ser prácticamente nadie a ser un héroe gracias a una canción: «Marina». Una narración fundamentada en hechos verídicos, pero con toques ficticios como son la historia de la madre o los problemas amorosos del protagonista.
Respecto a la elaboración de la película, el director remarca lo difícil que fue conseguir hacer una coproducción, ya que el acuerdo estuvo a punto de romperse. Coninx también enfatizó la idea de que esta película llevaba rondando en su mente desde 2007. Al final consiguió una financiación modesta con la que sacar adelante la obra. Otro aspecto importante fue, en palabras de Coninx, lo curioso que resultó conseguir un actor, ya que desde el principio Matteo Simoni estaba dispuesto a realizar el papel. «Necesitaba realizar este papel, me lo pedía el cuerpo”, comentó el actor.
Simoni añadió que él había crecido en la provincia de Limburgo, lugar donde se desarrolla la película, por lo que conocía las zonas y las canciones. Además sus padres fueron inmigrantes italianos, y este papel le daba la oportunidad de indagar sobre sus raíces. Matteo hizo especial alusión a su abuelo músico y a su padre minero. Lecciones de canto y de acordeón, largas horas de grabación y composiciones musicales conforman esta película que relata la pobre vida de un joven y como puede dar un cambio radical en apenas unas horas.