«Il gioiellino», una película inspirada en el caso Parmalat, llega a los cines italianos

El actor Toni Servillo, recordado por sus trabajos en «Il divo» y «Gomorra», estrena en Italia, a las órdenes de Andrea Molaioli («La ragazza del lago») «Il gioiellino» [tráiler] (de la que BIM distribuye 170 copias en los cines italianos el 4 de marzo): una película inspirada en el escándalo del crack de Parmalat.

El caso Parmalat llevó a la cárcel por delito de fraude a los dirigentes de la empresa agroalimentaria de ese nombre y sumió en la desesperación a accionistas y pequeños inversores. En la pelicula, coproducción entre Francia e Italia Toni Servillo da vida a la verdadera cabeza invisible de la empresa. Remo Girone, Sarah Felberbaum, Fausto Maria Sciarappa, Lino Guanciale, Vanessa Compagnucci, Lisa Galantini, Renato Carpentieri y Gianna Paola Scaffidi completan el reparto.
A caballo entre la crónica y el apólogo, «Il Gioiellino» no pretende ser una cinta de investigación; Molaioli
tenía como modelo «El caso Mattei», de Francesco Rosi, y declara que la idea «surgió a partir de una reflexión
sobre esta crisis global, de la inquietud que en los últimos años ha inundado los sistemas financieros. El
asunto de Parmalat era emblemático en el ámbito italiano, con ese familismo amoral y esa falta de escrúpulos en
la gestión que más que de Italia, es característica de todo Occidente. Me interesaba la esquizofrenia de los
personajes que insisten en que todo va bien mientras caminan al borde del abismo».
El título de la película es parte de una frase que pronunció el verdadero protagonista del fraude de Parmalat, Callisto Tanzi: «Aparte de ese agujero de 14.000 millones, la empresa es una pequeña joya (gioiellino en italiano)».
El guión lo firman el director, la joven Ludovica Rampoldi y Gabriele Romagnoli, periodista, corresponsal y editorialista de un importante diario que ha imprimido en la película un rigor informativo excesivo, en detrimento del espectáculo.
Aunque las interpretaciones de Girone y Servillo muestran todo el cinismo de estos managers de pueblo amantes de las finanzas más creativas, no consiguen aplacar algunos momentos de cansancio. Andrea Molaioli ha trabajado a lo largo de su carrera como asistente de dirección de Nanni Moretti, Carlo Mazzacurati y Daniele Lichetti, pero le falta la causticidad del primero, la pasión del segundo y los tiempos cinematográficos que emplea magistralmente el tercero: todavía tiene que dar con un estilo propio.