Es el tercer largometraje de ficción de la francesa Delphine Gleize

Desde este próximo lunes día 1 de marzo se rueda el tercer largometraje de ficción de la francesa Delphine Gleize, «De toutes mes forces», la historia de la amistad entre un muchacho con una enfermedad genética que le impide estar expuesto a la luz del sol y el dermatólogo que le atiende desde su infancia. El joven Quentin Challal y Vincent Lindon dan vida a ambos personajes.

Recodada como directora de «Carnages», protagonizada por Ángela Molina y presentada en la sección Un certain regarde del Festival de Cannes, Delphine Gleize es también la guionista de este melodrama que narra la historia de Romain, de trece años, que sufre una deficiencia genética rarísima e incurable: toda luz del día directa le es fatal. El joven vive una amistad poco común con David, el dermatólogo que se ocupa de él desde la infancia y que se apasionó por su caso. Pero, llegado el día de su separación, el choque es violento y causará una sed de vida insospechada en uno mientras que el otro encontrará difícilmente las ganas de luchar.
Junto a Vincent Lindon y al joven Quentin Challal, el reparto se completa con Emmanuelle Devos («Cómplices»), Caroline Proust y Nathalie Boutefeu. Lindon acaba de estrenar en Francia «Mademoiselle Chambon», con unas excelentes críticas. Delphine Gleize debutó en la dirección en 2006 con «L’ homme qui rêvait d’un enfant».
La película está producida por Jérôme Dopffer y Bénédicte Couvreur para Les Productions Balthazar (que produjo todas las películas de Delphine Gleize y que coprodujo «Tiro en la cabeza» del español Jaime Rosales), «De toutes mes forces» cuenta con un presupuesto de 3,4 millones de euros.