SE ESTRENA EN EL TEATRO ESPAÑOL DE MADRID UN ESPECTÁCULOS CON TEXTOS DEL SIGLO XIX PARA MOSTRAR EL ORIGEN DE LOS CONFLICTOS ACTUALES

El Teatro Español de Madrid ha estrenado «Paseo Romántico», una pieza que se representa a través de cuatro funciones únicas hasta este domingo día 3 de octubre. La función, dirigida por Laila Ripoll, cuenta con un reparto excepcional formado por Blanca Portillo, José Coronado, Israel Elejalde, Marcial Álvarez y el músico-cantante Marcos León. La dramaturgia ha sido concebida por Juan Carlos Plaza-Asperilla.

Con el subtítulo «La pasión española del siglo XIX», este montaje, que se abre con la Declaración de la Constitución de Cádiz de 1812, da vida durante cien minutos a las principales joyas literarias del Romanticismo. Para ello se sirve de una selección de fragmentos de hasta treinta textos distintos, entre los que destacan: «Don Juan Tenorio», de José Zorrilla; «El estudiante de Salamanca», de José de Espronceda; «Don Álvaro o la fuerza del sino», del del Duque de Rivas; «Rimas», de de Gustavo Adolfo Bécquer; o «Cantares Gallegos», de de Rosalía de Castro. La pieza culmina con la representación de «El día de difuntos de 1836. Fígaro en el cementerio», de Mariano José de Larra, máximo exponente de los autores románticos nacionales.
Los numerosos escritos que componen el repertorio en que se basa la obra abarcan todas las manifestaciones literarias de la época: periodismo, teatro, epistolario, poesía amorosa, coplas populares, sátira, crónica político-social. A través de la interpretación de dichos textos, los actores acercarán al espectador, la España convulsa de hace dos centurias, caracterizada no sólo por las luchas entre liberales y absolutistas sino también por la agitación amorosa de nuestros reyes: las queridas de Fernando VII, los ocho hijos secretos de la reina María Cristina, la homosexualidad del rey Francisco de Asís, los amantes de la reina Isabel II.
En palabras de Juan Carlos Plaza-Asperilla, muestra una España que «se desangraba en luchas civiles por tronos, constituciones, gobiernos y sueños de libertad”. Y que encontró en el Romanticismo el mejor de los espejos gracias a las coplas populares, las rimas amorosas, las composiciones teatrales o himnos como el del Comandante Riego. Todos ellos explican el origen de los confictos actuales.