El peculiar cineasta espera estrenar en 2016 su revisión del clásico de Cervantes, un proyecto hasta ahora maldito
Inasequible al desaliento, Terry Gilliam no tira la toalla y sigue adelante con «Don Quijote», título que parece que tendrá el viejo proyecto maldito comocido como «El hombre que mató a Don Quijote». Según Variety, el cineasta autor de obras inclasificables como «Doce monos» está preparado para llevar a cabo su séptima intentona con el joven Jack O’Connell como protagonista.
«El siete es mi número de la suerte, así que rompamos la maldición y hagámosla», comentó con humor Gilliam, quien ha visto desfilar los años y los esfuerzos frustrados. También los actores elegidos para ponerse en la piel del mítico personaje: intérpretes como Robert Duvall y Johnny Depp, que ha estado siempre en el proyecto. Molinos de viento que, por fin, parecen a punto de transformarse en gigantes.
De acuerdo con Variety, esto es lo que tiene en mente el siempre irreverente Gilliam, que en el inmediato Festival de Gijón recibirá el reconocimiento a toda su trayectoria: «Un giro moderno y satírico del relato, «Don Quixote» está protagonizada por O’Connell como Toby, un director de publicidad que viaja a España para un rodaje y se cruza con un gitano que le entrega una copia de una película que filmó cuando era un estudiante: una revisión lírica de la historia de Don Quijote ambientada en un viejo pueblo. Conmovido por el hallazgo, Toby inicia un extraño viaje para encontrar el pequeño pueblo donde se rodó el filme, y se ve atrapado en una serie de catástrofes».
«La película captura la esencia de todo lo que el público ama en las obras de arte inolvidables de Gilliam», ha dicho el distribuidor Gregoire Melin. El español Adrián Guerra se encarga de producir el proyecto a través de su compañía Nostromo Films, a partir de un presupeusto de 17 millones de euros. El estreno está fijado para mayo de 2016.
La elección de Jack O’Connell para el rol protagonista confirma el creciente caché de este joven actor inglés («Derby», 1990) que suena con fuerza para los Oscar por su papel en «Unbroken», la película dirigida por Angelina Jolie que cuenta la historia real de Louis Zamperini: un atleta olímpico que, durante la Segunda Guerra Mundial, sobrevivió al cautiverio y torturas del ejército japonés.
O’Connell también ha cosechado críticas muy favorables por «’71», donde da vida a un desorientado soldado británico abandonado por su unidad después de una revuelta en las calles de Belfast en el agitado 1971. Fogueado en la televisión de su país, se había dejado ver anteriormente en filmes como «United», sobre la tragedia aérea del Manchester United en Munich en el 58, y «300: El origen de un imperio».