DIRIGIDO POR ANDRÉS RUBIO, RECOGE COMO EL ALCALDE DE CAMPILLO DE LAS RANAS FUE EL PRIMER EDIL DE UN PUEBLO ESPAÑOL EN ACEPTAR CASAR A PAREJAS DEL MISMO SEXO
El documental «Campillo, Sí quiero», del periodista, Andrés Rubio, se proyecta mañana, viernes 13 de febrero, dentro de la Sección Informativa del Festival Internacional de Cine de Las Palmas de Gran Canaria, el primer festival de carácter generalista que, como recordó el alcalde de la localidad de Campillo de las Ranas, Francisco Maroto, la incluye en su programación.
«Campillo, sí quiero» cuenta la peculiar historia de este pequeño municipio de Guadalajara y de su alcalde, quien se enfrentó al intento premeditado de boicotear la ley de matrimonios gay, según ha recordado el director de la cinta, el periodista Andrés Rubio.
«Lo que refleja la película es la normalidad, el ambiente de tolerancia en un pueblo que demuestra que la gente se adapta a los cambios mucho mejor que lo que dicen los partidos políticos», ha dicho Rubio, durante su presentación a los medios de comunicación que cubren el Festival de Cine. Ha valorado la iniciativa de original y audaz destacando que «algo que comenzó como un grito de militancia terminó siendo el dinamizador económico de un pueblo que ahora cuenta con una escuela para 20 niños, una academia de idiomas para emigrantes y luz todo el día en las 5 pedanías del término municipal. En Campillo se creó toda una estrategia nupcial de desarrollo rural frente al despoblamiento de los pueblos pequeños», añadió.
«Las bodas en Campillo de las Ranas son igual de horteras que en el resto de España pero no hemos tenido todavía ningun divorcio», ha asegurado el alcalde, que también asistirá a su proyección en Las Palmas de Gran Canaria. «Desde que empezaron las bodas 130 parejas han contraido matrimonio, de ellas 40 de personas homosexuales. Es un documental muy especial», ha dicho el alcalde, que se ha paseado con él por numerosos festivales. Sobre el proceso de rodaje, Rubio ha recordado que «no fue fácil lograr que las parejas aceptaran que grabaramos su boda por eso la pelicula se estructuró de manera muy azarosa. Nos costó mucho grabar la boda de una pareja de mujeres». Tras su presentación en el Festival de Cine de Reykjiavik el equipo de la pelicula decidió hacer un añadido para incluir la boda del alcalde. «Francisco Maroto tiene un gran potencial simbolico y lo queríamos aprovechar para reflejar que es la naturalidad y el sentido comun los que han ganado».
De momento en Campillo han puesto el cartel de todo ocupado y ya tienen comprometidas todas las bodas de este año e incluso cuentan con lista de espera para el 2010. Francisco Maroto ha querido dejar claro que la situación que hizo famoso a su pueblo se está normalizando. En este sentido ha insistido que «Campillo empieza a ser historia y hemos demostrado que la legalizacion de los matrimonios homosexuales no fue una reacción frívola». El documental se proyecta mañana viernes, a las 20.30 h., dentro de la sección Informativa del Festival de Cine