John Barry.
Intérpretes
Sinopsis
David Murphy (Woody Harrelson) y Diona Murphy (Demi Moore) forman un feliz matrimonio. Se conocieron cuando eran estudiantes y el amor surgió entre ambos, que no solo se ha mantenido con el paso de los años, sino que ha crecido y madurado. Ahora, él es arquitecto y ella trabaja en una inmobiliaria. Es el momento de que sus sueños se hagan realidad. David quiere construir una maravillosa casa en la que ambos puedan vivir, pero es un sueño que se va a destruir antes de poner el último ladrillo. Debido a la recesión, los dos pierden el empleo y su situación económica comienza a complicarse. No pueden pagar sus deudas y el banco se queda con la casa. En un momento de desesperación deciden poner rumbo a Las Vegas y arriesgar en la ruleta los últimos 5.000 dólares que les quedan. Pero lo acaban perdiendo todo, aunque les queda el amor. Entonces, un multimillonario llamado John Gage (Robert Redford) se les cruza en el camino. En el salón de juegos, John pide a Diana que le acompañe antes de apostar. Diana no tarda en traerle suerte y hace que gane una fortuna. John quiere recompensar a la pareja por la suerte que le ha transmitido Diana, les invita a cenar por todo lo alto y a pasar la noche en una suite de un gran hotel. Pero John es un hombre que todo lo consigue con dinero y está dispuesto a demostrárselo a esta pareja de enamorados a los que no les queda nada. Para ello les hace una proposición indecente: Les regalará un millón de dólares si Diana pasa una noche con él. La primera reacción de David y Diana es de rechazo a la propuesta, pero ninguno de los dos puede dejar de pensar en el tema. Tendrían la oportunidad de solucionar definitivamente todos sus problemas financieros. Total, sólo es una noche, y ¿qué significa sólo una noche ante el amor que sienten el uno por el otro? Acaban aceptando. Pero las cosas son mucho más complicadas de lo que parecen. Para empezar, descubren que la casa tiene un nuevo dueño, John Gage, y que no está en venta ni siquiera por un millón de dólares. Sin embargo, hay algo peor, David no acaba de encajar que, bajo su consentimiento, su esposa le haya sido infiel. Empiezan las desconfianzas, los reproches, el mal ambiente, las discusiones y peleas, hasta que deciden separarse. A partir de ahora seguirán caminos diferentes. Pero John Gage vuelve a cruzarse en la vida de Diana. Aunque al principio le odia por haberle destrozado en matrimonio, poco a poco se da cuenta que es todo un caballero. David, por su parte, no la puede olvidar.