Titulo original: The Trip
Año: 2010
País: Gran Bretaña
Duración: 107 min.
Dirección: Michael Wnterbotton
Guión: Michael Wnterbotton a partir de su propia serie de televisión
Música:
Steve Brown.
Intérpretes
Steve Coogan, Rob Brydon, Paul Popplewell, Margo Stilley, Claire Keelan, Rebecca Johnson, Dolya Gavanski, Kerry Shale, Mercé Ribot, Michael Bennett y Ben Stiller.
Sinopsis
Cuando el suplemento dominical de gastronomía del periódico «The Observer» contrata a Steve (Steve Coogan) con el fin de repasar media docena de restaurantes, Él decide mezclar trabajo con placer y planifica un viaje alrededor del Norte de Inglaterra con su novia americana, amante de la comida. Pero cuando su novia decide abandonarlo y vuelve a Estados Unidos, Steve se enfrenta a vivir una semana comiendo solo, lo que no es exactamente el viaje que tenía en mente. De mala gana, llama a Rob (Rob Brydon), la única persona que puede estar disponible. Rob, totalmente incapaz de refutar una comida gratis, (y mucho menos seis) acepta y juntos se ponen en marcha hacía una aventura culinaria. Durante las seis comidas en seis restaurantes distintos alrededor del Lake District, Lancashire y los Valles Yorkshire, esta «extraña» pareja acaba dando cuenta no solo de una buena cantidad de excelente comida, sino de cuestiones como la naturaleza de la fama, las relaciones y sus propias vidas.
Comentario
Un director tan variopinto, prolífico e hiperactivo como Michael Winterbotton, capaz de tocar –con diferente fortuna, desde luego- tantos escenarios, épocas y registros, acarrea sobre sus espaldas tal equipaje, que los recursos se le convierten, si no en Arte, sí al menos en gran oficio. Y eso es lo que luce y reluce en “The Trip”: un derroche de profesionalidad, de reflejos bien adiestrados. Porque, si se mira bien, la historia parte de un planteamiento simple, más que sencillo; el proyecto en cuestión parece uno de esos encarguitos casi inevitables, promocionales, cómodos y, como ocurre con el protagonista, bien pagados; de modo que el expediente quedaría cubierto en principio con “una de aliño”. Pero no. Lo que surge de ese flojo plan entre amiguetes es otra cosa bien distinta: una regocijante travesía que, partiendo de la nada, llega a momentos de verdaderos destellos. Le ponemos un pero: su duración, le sobran unos cuantos minutos. Pero hay tanta chispa, tanta mala uva y tanto ingenio entre esos dos colegas que el viaje gana puntos a medida que corren los kilómetros. Claro que gran culpa del resultado la tienen dos enormes, generosos, actores, Steve Coogan y Rob Brydon, compañeros “…y sin embargo amigos” del propio Winterbotton, juntos los tres en “24 Hour Party People”, por ejemplo. Ellos de nuevo se prestan a todo, se meten de cabeza en el invento y, totalmente cómplices, acceden al engañoso juego que se les plantea, que es el de hacer de ellos mismos, sin serlo. O no…? una gozada, en todo caso.