Ángela (Ana Torrent) es una estudiante de Imagen en la Facultad de Ciencias de la Información de Madrid que está preparando una tesis sobre la violencia audiovisual. Como complemento para su trabajo, el profesor Figueroa (Miguel Picazo), el director de su tesis, se compromete a buscar en la videoteca de la facultad películas extremadamente violentas. Por otra parte un compañero de clase llamado Chema (Fele Martínez), la invita a su casa para ver cine gore muy violento. Mientras visita la videoteca, Figueroa descubre de modo casual un laberinto de galerías subterráneas donde se almacenan cientos de cintas. A la mañana siguiente, Angela lo encuentra muerto en la sala de proyección. La joven roba la cinta que estaba viendo cuando falleció y, tras intentar verla en su casa, acude con ella a casa de Chema. Es una snuff movie, una grabación real de un asesinato. Angela contempla con horror como una antigua compañera desaparecida dos años antes, es torturada hasta morir. Analizando la textura de la imagen, Chema logra identificar el modelo de cámara que ha utilizado el asesino. Días después, Angela tropieza en la facultad con Bosco (Eduardo Noriega), un compañero que tiene la misma cámara, descubriendo que era amigo íntimo de Vanessa, la joven que ha visto morir en la película. El profesor Castro (Javier Elorriaga), sustituye a Figueroa para dirigir la tesis de Angela. Tras una conversación algo desconcertante, éste le muestra una grabación en circuito cerrado en donde se la ve robando la cinta que veía Figueroa, Es entonces cuando Angela se da cuenta que se está metiendo en algo muy peligroso y que quizá ella se convierta en la próxima víctima protagonista de una snuff movie.
