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Sinopsis
Con su nariz retocada, sus piernas interminables, su trabajo en la prensa del corazón, sus aspiraciones a la fama y su facilidad para romper corazones, Tamara Drewe (Gemma Arterton) es la reina de la prensa del corazón londinense del siglo XX. Su regreso a su pueblo de Dorset, al sudoeste de Inglaterra, donde vivía su madre, para vender su casa natal, supone un trastorno para la pequeña comunidad que hasta entonces vivía en paz. Cuando se fue del pueblo, Tamara era una adolescente poco agraciada pero vuelve convertida en una despampanante mujer que desata una tormenta de envidia, deseo y cotilleo adondequiera que va. Hombres y mujeres, bohemios y gente del campo, un autor de best-sellers, un universitario frustrado, una estrella del rock retirada o un muchacho de la región…todos se sentirán atraídos por Tamara. Hombres como Andy Cobb (Luke Evans), un atractivo granjero, hijo de los antiguos propietarios de la casa que hoy es de Tamara y que siempre ha estado enamorado de la chica. Guapo y sensible, este hombre trabaja para los Hardiment, la pareja que regenta la casa-retiro para escritores. De hecho, Nicholas Hardiment (Roger Allam) es un popular autor de best sellers, un cincuentón mujeriego que se aprovecha todo lo que puede, de la monumental eficacia, el incansable trabajo y el amor ciego que le profesa su mujer Beth (Tamsin Greig). Uno de los clientes, en el momento en que aparece la seductora periodista, es Glen McCreavy (Bill Camp), un experto en el escritor Thomas Hardy, un tipo de mediana edad, inteligente y afectivo, que siente una simpatía muy especial por su ocasional casera. Todos ellos miran a Tamara Drewe de una manera distinta, aunque ninguno escapa a los atractivos de la joven. La nueva situación en el pueblo desata el deseo y los celos de algunos, pero también, y muy intensamente, la envidia de Jody Long (Jessica Barden), una adolescente aburrida, enloquecidamente enamorada de Ben Sergeant (Dominic Cooper), un batería, estrella de rock, que es el prometido de Tamara. Y son los ardores juveniles de Jody los que, a pesar de los reparos de su amiga Casey Shaw (Charlotte Christie), desatan el colosal lío que se va a formar en el pueblo. Tamara Drewe se deja querer y se olvida de las consecuencias en las vidas de otras personas que tienen algunas de sus relaciones, sin percibir que su belleza incendiaria y divagaciones amorosas despertarán oscuras pasiones y provocarán una cadena de circunstancias tan absurdas como conmovedoras