Ken Thorne.
Temas musicales: “Superman”, de John Willams; y “Pick Up the Pieces”, interpretado por The Average White Band.
Intérpretes
Sinopsis
Poco antes de la destrucción del planeta Krypton, tres de sus peores criminales, Non (Jack O’Halloran), Ursa (Sarah Douglas) y el general Zod (Terence Stamp), fueron condenados y encerrados en la Zona Fantasma, una prisión de energía en el Espacio. Gracias a su castigo, sobrevivieron a una muerte segura de haber permanecido en el planeta. Por otro lado, unos terroristas armados con una bomba atómica secuestran la torre Eiffel de París, y Lois (Margot Kidder), que ha acudido a cubrir un reportaje, queda atrapada en un ascensor de la torre donde está la bomba. Rápidamente Clark (Christopher Reeve), como Superman, vuela a París a detener a los secuestradores. El ascensor se precipita al suelo y la explosión del aparato es inminente, pero aparece Superman que sale al espacio con el ascensor y la bomba y lo lanza lejos de la atmósfera de la Tierra. La poderosa bomba explota, y la onda expansiva se extiende por el Espacio y alcanza la prisión de los tres criminales de Krypton, liberándoles. Al estar cerca del Sol amarillo han adquirido los mismos poderes de nuestro héroe, y se dirigen a la órbita terrestre. Llegan a la Luna, donde una expedición Ruso-Americana está realizando unas investigaciones de la superficie lunar. Allí, Non, Ursa y el general Zod se dan cuenta de sus fantásticos y nuevos poderes, y los aprovechan para asesinar cruelmente a los astronautas y cosmonautas, dirigiéndose después hacia la Tierra para gobernar a la débil raza de los humanos. Mientras tanto, Clark y Lois se encuentran investigando un caso de fraude en las cataratas del Niágara. Hasta que de pronto, un niño que estaba jugando en la barandilla cae al agua, y Superman aparece para salvarlo. Lois comienza a sospechar que es extraño que siempre que aparece Superman, Clark está por allí, pero no visible. Lois, convencida de que Clark es Superman, le pone a prueba y se arroja al río para que, si es Superman, la salve. El héroe no tiene más remedio que hacerse el asustado y la ayuda cortando una rama con su visión calorífica que la ayude a mantenerse a flote. Lois sale al final del agua, avergonzada y convencida de lo estúpido de su duda. Por otro lado, Lex Luthor (Gene Hackman) se ha escapado de la prisión en globo gracias a la señorita Teschmacher (Valerie Perrine) y se dirige hacia el Polo, puesto que ha descubierto que es el refugio oculto de Superman, y allí descubre la Fortaleza de la Soledad y los secretos del héroe. Mientras, los malvados criminales de Krypton han llegado a la tierra, a un pequeño pueblo de EEUU, y comienzan a sembrar el caos. En el hotel del Niágara, Clark tiene un tropiezo y cae con tan mala fortuna que su mano se queda entre las llamas de la chimenea. Lois corre a ayudarle creyendo que se va encontrar la mano quemada, pero está perfecta. Ante lo ocurrido, Clark se quita las gafas y le confiesa quién es, y ella le dice que está enamorada de él. Entonces, Superman decide llevarla a su «casa», a la Fortaleza de la Soledad, y contarle toda la verdad. En la Fortaleza, Superman habla con su madre a través de los cristales kryptonianos y le expone su deseo de casarse con Lois. Su madre le advierte que: «si desea vivir con una humana y como un humano, deberá convertirte en uno de ellos, a costa de sus poderes”. Aceptada la condición, los poderes de Superman desaparecen, y será Clark para siempre. Enamorados, regresan a la ciudad dispuestos a empezar una nueva vida. En el camino se detienen en un bar donde tienen un altercado con un camionero bravucón que da a Clark una paliza, mientras éste ve asombrado su propia sangre. En Metrópolis reina el caos causado por los tres criminales, que han tomado la Casa Blanca y ahora el Planet. Incluso han reformado el Monte Rushmore con sus caras. Luthor se ha aliado con ellos, prometiéndoles que si encuentran a Lois y la ponen en peligro, se les pondrá a tiro Superman, el hijo de juez que les condenó. Ante el desarrollo de los acontecimientos, Clark vuelve a la Fortaleza, y le ruega a su madre que le dé otra oportunidad para enfrentarse a los poderosos Ursa, Non y Zod. No serán unos contrincantes fáciles, ya que cuentan con los mismos poderes que él.