Titulo original: Rosetta
Año: 1999
País: Bélgica - Francia
Duración: 95 min.
Dirección: Luc y Jean-Pierre Dardenne.
Guión: Luc y Jean-Pierre Dardenne.
Música:
Jean-Pierre Cocco.
Intérpretes
Émilie Dequenne, Fabrizio Rongione, Anne Yernaux, Olivier Gourmet, Bernard Marbaix, Frédéric Bodson, Florian Delain, Christiane Dorval, Mireille Bailly, Thomas Gollas, Leon Michaux, Victor Marit, Colette Regibeau, Claire Tefnin, Sophie Leboutte, Gaetano Ventura, Christian Neys, Valentin Traversi y Jean-Francois Noville.
Sinopsis
A los 17 años, Rosetta (Émilie Dequenne) vive con su madre (Anne Yernaux) en una caravana dentro de un camping de menesterosos de una barriada periférica de Lieja. Su madre es alcohólica e irresponsable y Rosetta no quiere seguir su suerte. Para ello, quiere trabajar. Sólo se vive, sólo se es persona si se tiene un trabajo, piensa, y ella defiende con las uñas las posibilidades que encuentra para no depender de las caridades de los otros. Y corre y corre una y otra vez en busca de su destino y sus derechos de persona. Cada día, Rosetta lucha por un trabajo que encuentra, que pierde, que vuelve a encontrar, que le quitan, que recupera… obsesionada por el temor a desaparecer, por la vergüenza de ser una marginada. Quiere una vida normal, con ellos, entre ellos. La joven tendrá que recurrir incluso a la violencia para preservar una situación laboral que le permita amortiguar las secuelas del alcoholismo de su madre o la precariedad de la caravana en la que viven, aunque para ello tenga que destruir a Riquet (Fabrizio Rongione), la única persona que ha mostrado un poco de cariño hacia ella.
Comentario
Película que ganó la Palma de Oro de Cannes (arrebatándosela a Todo sobre mi madre, de Almodóvar) que muestra la vida de una joven marginada en un suburbio de Bruselas. Se trata del segundo largometraje de ficción escrito y dirigido por los hermanos Luc y Jean-Pierre Dardenne, veteranos realizadores belgas con una larga experiencia en el terreno documental que destacaron internacionalmente con su primera incursión en la ficción, La promesa y que tras Rosetta han realizado El hijo. Las tres películas reflejan su labor como documentalistas, ya que se esfuerzan por hacer un retrato realista de problemas sociales tan extendidos como la violencia o el desempleo. Aquí retratan a una superviviente urbana, personaje interpretado por la actriz, que entonces tenía 18 años Emilie Dequenne, y que también obtuvo el premio de interpretación femenina en aquel Festival. Rodada cámara en mano a base de primerísimos planos de ella, resulta un filme bastante duro, que se mantiene por el buen trabajo de la actriz, que está presente en todos los planos.