Intérpretes
Sinopsis
La ciudad de Orlando, en Florida, bien podría ser la luna para Jake Tyler (Sean Faris), un chico de Iowa, con todas esas mansiones de diez millones. Los adolescentes privilegiados de esta versión del sueño americano con esteriodes no necesitan nada; recorren los vecindarios de lujo en sus coches caros, con ropa de marca desenfadada y con la actitud hastiada del que lo tiene todo demasiado pronto en esta vida. Para ellos la vida es una gran fiesta. Jake era un joven atleta prometedor en el equipo de fútbol de casa, pero en la cuidad no es más que un recién llegado. Considerado el “chico nuevo” con su actitud taciturna y su ropa de leñador, no le resulta nada fácil hacerse amigos, aunque no le importa demasiada. Callado y retraído, sufre en silencio la perdida reciente de su padre. Aún así, no pasará demasiado tiempo antes de que el atormentado pasado de Jake se reavive cuando un vídeo de una espectacular pelea a puñetazos en un partido en Iowa comienza a circular. Las cosas toman un rumbo inesperado cuando conoce a Baja (Amber Heard) en clase. Es hermosa – y mucho más inteligente de lo que deja entrever. Gracias a su invitación, Jake acude a una fiesta en la que se ve arrastrado a pelear con un niñato de la escuela llamado Ryan McCarthy (Cam Gigandet). En la pelea acaba derrotado y humillado, lo que le vuelve suspicaz con todo el mundo, especialmente con Baja, que tal vez le haya hecho esta encerrona. Pero es el entusiasta y bonachón compañero de clase de Jake, Max (Evan Peters), quien ve un campeón en Jake. Max le cuenta a Jake la existencia de un deporte conocido como artes marciales mixtas (AMM) y le invita a que conozca a su entrenador, Jean Roqua (Djimon Hounsou). Jake ve inmediatamente que las AMM no son peleas callejeras, sino una especie de arte marcial que decide dominar en ese momento. Roqua le tomará bajo su tutela, pero es Jake el que tiene que encontrar la paciencia, la disciplina y la motivación para tener éxito. Para Jake, hay mucho más en juego que una victoria. Su decisión no servirá solamente para ajustar una cuenta, sino para definir su identidad.