Intérpretes
Sinopsis
En 1847, los Estados Unidos eran una tierra de pioneros, de insaciables buscadores de oro de camino al Oeste en un país que extiende sus fronteras, alargando sus brazos y destruyendo toda la tierra de la que es capaz. El capitán John Boyd (Guy Pearce) se ha convertido en un héroe y en una víctima durante este período de implacable destrucción… de una manera que nunca hubiera podido imaginar. El viaje al infierno de Boyd comienza con un acto de cobardía durante una horrorosa batalla de la guerra entre México y los Estados Unidos por el que se ganará el destierro a un puesto militar avanzado y perdido de la mano de Dios, estación de paso de los viajeros que van al Oeste en las heladas y áridas montañas de Sierra Nevada, California. En el inhóspito lugar aparece un día un hombre llamado Colghoun (Robert Carlyle), un colono escocés medio moribundo que les narra una macabra historia: asegura ser el único superviviente de una caravana que quedó atrapada en las nieves y en la que para sobrevir, y una vez agotadas las provisiones, se dieron casos de antropofagia. Una patrulla mandada por el propio capitán Boyd y que lleva consigo a Colghoun, parte hacía el lugar en el que éste indica que sucedieron los hechos. Sin embargo en la narración hay algo que no encaja, sobre todo cuando a primera vista, tras llegar al lugar, todo parece tranquilo. En la zona, una de las leyendas de los indios del lugar, asegura que cualquier guerrero es susceptible de transformarse en aquello que se coma.