Intérpretes
Sinopsis
Modesto (Arévalo) es un profesor de literatura, mustio y desmotivado, con poca mano para los alumnos díscolos. Desde niño tiene el don de ver a los muertos que le rodean, aunque sigue acudiendo a terapia por si fuera cosa de su imaginación. Eso no sólo le ha costado una fortuna en psiquiatras, sino que también ha hecho que le despidan de todos los colegios donde ha trabajado. Su suerte cambia cuando consigue plaza en el Monforte, un colegio muy pijo, en el que los profesores dimiten, los estudiantes tienen pesadillas y Tina (Alexandra Jiménez), la directora, que ha heredado el colegio de su padre, no gana para sustos. Allí Modesto tendrá una peculiar responsabilidad: deberá lograr que cinco alumnos particularmente problemáticos, que han convertido un colegio de prestigio en la casa de los horrores, pasen sus exámenes y finalmente dejen la escuela y se larguen de allí de una vez por todas: Jorge (Jaime Olías), en el momento de su muerte era rubio, atlético, guapo y ligón con un toque sensible. 20 años después sigue igual, si acaso un poco más etéreo; Mariví (Andrea Duro) tenía que haber salido de cuentas hace veinticuatro años y medio, pero se está haciendo de rogar. En 1986 era tan guapa y popular en su colegio que acabó el curso embarazada. Desde entonces se ha pasado la eternidad a punto de dar a luz e idealizando la figura del padre de la criatura; Pinfloy (Javier Bódalo), que estaba borracho y con ganas de más el día en que ardió la biblioteca del Monforte. Su ímpetu fiestero es la juerga eterna; Ángela (Anna Castillo), dos décadas atrás era buena estudiante, sensible a la belleza del arte y gafotas, esto es, lo que viene a ser la típica empollona de toda la vida o mejor dicho, de toda la muerte; y Dani (Alex Maruny), gamberro, chulo, prepotente y tozudo, ya era un fantasma de instituto antes de morir junto a sus cuatro compañeros; en el fondo es el más asustado del grupo, quizás por el secreto que aún no ha compartido con ellos. Modesto es el perfecto candidato para trabajar con ellos, pero no lo va a tener fácil ya que sus pupilos llevan muertos 20 años, desde que 20 años atrás un incendio los mató a todos. Es la directora del colegio, al borde de un ataque de nervios y desesperada por sacar adelante el centro escolar que heredó, y cuya reputación se la están cargando los fantasmas, la que recurre a Modesto como su única tabla de salvación. Modesto tiene además otro fantasma propio, el del padre (Luis Varela) del psiquiatra ((Joaquín Reyes) que trata a Modesto. Siempre está en la consulta de su hijo y, dada su experiencia personal en el mundo de los muertos, acaba tratando indirectamente al profesor del Monforte. Además está José María Otegui (Carlos Areces), el Presidente de la asociación de padres obsesionado con la buena fama del Monforte. Pesado por convicción, cansino desde las entrañas e insistente hasta la idiotez. En el colegio Modesto conocerá a Elsa (Aura Garrido), la alumna gótica del colegio. No se integra con sus compañeros, al menos no con los vivos. Prefiere el contacto con los muertos que habitan el instituto y sopesa la posibilidad de pasarse a esa dimensión. También Manuela (Silvia Abril), la secretaria para todo en el Monforte. Cotilla, vehemente, lanzada, predispuesta y con un puntillo de furor uterino. Para tratar con los fantasmas del colegio propone rituales santeros que incluyen la muerte de una gallina, eso sí, sólo una. Y por último conocerá a la consejera de educación (Elena Irureta), funcionaria al mando del área educativa y azote de Tina para que reconduzca el caos del Monforte. La consejera es recta, implacable y metódica, aunque en su juventud fue expulsada de un convento por montar timbas de póker
