POLLO AL VINAGRE

    120
    Titulo original: Poulet au vinaigre
    Año: 1985
    País: Francia
    Duración: 110 min.
    Dirección: Claude Chabrol
    Guión: Claude Chabrol y Dominique Roulet, según la novela Une mort en trop, de Dominique Roulet.
    Música: Matthieu Chabrol. Canción: Dominique Zardi.

    Intérpretes

    Jean Poiret, Stephane Audran, Michel Bouquet, Caroline Cellier, Lucas Belvaux, Jean Topart, Pauline Lafont, Jean-Claude Bouillaud, Joséphine Chaplin, Andrée Tainsy, Jacques Frantz, Dominique Zardi, Albert Dray, Henri Attal, Marcel Guy, Dominique Zardi y Jean-Marie Arnoux.

    Sinopsis

    Tres ricachones de un pueblo francés, el notario Hubert (Michel Bouquet), el médico Philippe (Jean Topart) y el carnicero Gérard (Jean-Claude Bouillaud), han montado una sociedad inmobiliaria y necesitan para sus operaciones el terreno donde se encuentra la casa de los Cuno. Estos, a pesar de las promesas, de las presiones e incluso de las amenazas, se niegan a vender su casa. Louis Cuno (Lucas Belvaux), un chico de 20 años muy tímido, vive allí con su madre (Stephane Audran), una mujer posesiva y un poco loca que se ha quedado paralítica tras una caída por las escaleras y no sale nunca de casa desde que la abandonó su marido, hace unos doce años. Louis es el cartero del pueblo, y para defenderse del acoso a que se ven sometidos, él y su madre abren todas las cartas destinadas a sus enemigos y las copian antes de que Louis vaya a repartirlas. Poco a poco, la situación se complica. Delphine (Josephine Chaplin), la mujer del médico, quién en realidad financiaba las operaciones de los tres socios, desaparece. Extraños sobres vacíos, supuestamente escritos por ella, llegan de Suiza. Louis, por su parte, espía las idas y venidas de sus enemigos, pincha las ruedas del coche del médico y, una noche, vierte azúcar en el depósito de gasolina del coche del carnicero. A la mañana siguiente, éste se mata en un accidente. Asustado, Louis se confiesa a Henriette (Pauline Laffont), la rubia y apetitosa empleada de correos, quién aprovecha la ocasión para atraparlo en sus redes. Llega al pueblo el inspector Lavardin (Jean Poiret), un policía de métodos poco ortodoxos, para dirigir la investigación.

    Comentario

    Chabrol une aquí su gusto por el cine negro con un humor mucho más regocijante que en otras de sus películas. Partiendo de un título de doble sentido, pues poulet, aparte de la acepción académica de pollo, tiene también en el argot el significado de policía, Chabrol muestra a un inspector de policía, Jean Lavardin, amable por fuera pero terrible por dentro (la típica pareja de policía bueno - policía malo unida en una sola persona) que de nuevo le sirve para fustigar a la burguesía francesa de provincias, una constante en su filmografía. La película tuvo una continuación, Inspector Lavardin.