MOTÍN A BORDO (1984)

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    Titulo original: The Bounty
    Año: 1984
    Fecha de estreno en España: 20-08-1964
    País: Gran Bretaña - EE.UU.
    Duración: 132 min.
    Dirección: Roger Donaldson
    Guión: Robert Bolt, basado en la novela de Richard Hough "Captain Bligh and Mr. Christian"
    Música:

    Vangelis.


    Intérpretes

    Mel Gibson, Anthony Hopkins, Laurence Olivier, Edward Fox, Daniel Day-Lewis, Bernard Hill, Phil Davis, Liam Neeson, Wi Kuki Kaa, Tevaite Vernette, Philip Martin Brown, Simon Chandler, Malcolm Terris, Simon Adams, John Sessions, Andrew Wilde, Neil Morrissey, Richard Graham, Dexter Fletcher, Pete Lee-Wilson, Jon Gadsby, Brendan Conroy, Barry Dransfield, Steve Fletcher, Jack May, Mary Kauila, Sharon Bower, Tavana, Derek Lyons y Peter Ross-Murray.

    Sinopsis

    En 1787, la Bounty, una fragata de la armada británica se hizo a la mar. El objetivo de su capitán, el Coronel William Bligh (Anthony Hopkins), era circunnavegar la Tierra siguiendo la ruta del Cabo de Hornos. Después de un larguísimo viaje de 3.500 millas marinas, lleno de penalidades y peligros, el severo capitán accedió a que la tripulación descansara en una remota y paradisíaca isla, aunque quizá durante demasiado tiempo; porque, cuando ordenó reanudar el viaje, la indisciplina de la marinería era ya incontrolable. En esas circunstancias el segundo de a bordo, Fletcher Christian (Mel Gibson), decide encabezar un motín contando con el apoyo de la mayor parte de la tripulación.

    Comentario

    Tercera versión, y la peor de todas, de la historia del famoso motín ocurrido en la fragata Bounty, que ya fuera abordada con mucha mayor fortuna por Frank Lloyd en los años treinta y Lewis Millestone, con Marlon Brando, en 1952. Igualmente el duelo interpretativo entre Mel Gibson y Anthony Hopkins en los papeles de segundo oficial Fletcher Christian y el tiránico capitán Bligh se encuentra muy por debajo del librado por Clark Gable y Charles Laughton en el filme primitivo e incluso del mantenido por Marlon Brando y Trevor Howard en la segunda adaptación del célebre relato ambientado en el siglo XVIII. Una correcta ambientación para una película que apenas sobrepasa las dos horas pero que parece como si durara cuatro.