Titulo original: Luftslottet som sprängdes / The Girl Who Kicked the Hornet`s Nest
Año: 2009
País: Suecia - Dinamarca - Alemania
Duración: 148 min.
Dirección: Daniel Alfredson
Guión: Jonas Frykberg y Ulf Ryberg, basado en ls novels homónima de Stieg Larsson
Música:
Jacob Groth
Intérpretes
Michael Nyqvist, Noomi Rapace, Michalis Koutsogiannakis, Anders Ahlbom, Hans Alfredson, Tina Berg, Alexandra Eisenstein, Lena Endre, Jacob Ericksson, Niklas Falk, Tekla Granlund, Annika Hallin, Lennart Hjulström, Niklas Hjulström, Donald Högberg, Agnes Kittelsen, Magnus Krepper, Johan Kylén, Sofia Ledarp, Tanja Lorentzon, Aksel Morisse, Per Oscarsson, Berit Sarvisé, Henrik Sjöman, Micke Spreitz, Georgi Staykov, Mirja Turestedt y Kerstin Green.
Sinopsis
Lisbeth Salander (Noomi Rapace) planea su venganza contra el hombre que trató de matarla y contra las instituciones gubernamentales que casi destruyeron su vida. Pero no va a ser una campaña directa. Tras recibir una bala en la cabeza, Salander está bajo una férrea supervisión en Cuidados Intensivos, y se enfrenta a un juicio por tres asesinatos en el momento que le le den el alta. Con la ayuda del periodista Mikael Blomkvist (Michael Nyqvist) y sus investigadores de la revista Millenium, Salander tendrá no sólo que probar su inocencia, también deberá identificar y denunciar a los políticos corruptos que permitieron a los vulnerables convertirse víctimas de abusos y violencia. Antes una víctima, Salander está lista para devolver los golpes.
Comentario
Como en la Bolsa, unos suben y otros bajan. O como en el juego de los desparecidos directamente. Lisbeth Salander medio se esconde en esta tercera entrega entre montañas de informes, legajos y vendajes. La Reina del título es ya suficientemente conocida por todos y ahora se nos muestra un tanto distante mientras que su mejor aliado, Michael Blomkvist, maneja algunas bazas decisivas a favor de ella pero pierde enteros también. Los dos protagonistas, no nos engañemos, han dicho y hecho a estas alturas casi todo y no conviene que se prodiguen. Pero curiosamente emergen aquí una serie de personajes de los que no teníamos la menor noticia y que son a fin de cuentas los que llevan el peso de la trama, la enderezan o la tuercen a placer: el grupo, sin ir más lejos, de “venerables” y agresivos compañeros de Zalachenko, toda una generación de entregados ex combatientes. La hermana de Blomkvist, la sagaz abogada; también un fiscal tan endeble como impresentable y, a mayor abundamiento, recupera presencia el perverso hermanastro, hombre de una sola arista, pero llena de fijaciones. Es la fórmula para que el entretenimiento, si no está del todo garantizado, se mueva un poco, se engrase. Y con esa carrera de relevos, la historia podría haber seguido eternamente. Pero había que retomar el hilo, volver al principio, no dispersarse; de forma que, como broche, resurge Salander, se explota su impactante imagen, majestuosa, estética y desafiante. Toda una reafirmación personal que descoloca a los que tiene enfrente… pero, como en la Bolsa, “La reina” cierra sesión a la baja. Vivir de las rentas siempre fue arriesgado, ya se sabe...
