Titulo original: Killing Them Softly
Año: 2012
País: EE.UU.
Duración: 97 min.
Dirección: Andrew Dominik
Guión: Andrew Dominik, basado en la novela de George V. Higgins.
Música:
Marc Streitenfeld.
Intérpretes
Brad Pitt, Scott McNairy, Ben Mendelsohn, Richard Jenkins, James Gandolfini, Ray Liotta, Sam Shepard, Vincent Curatola, Trevor Long, Max Casella, Christopher Berry, Ross Brodar, Julio Castillo, Joe Chrest, Garret Dillahunt, Oscar Gale, Mustafa Harris, Bella Heathcote, Wendy Clarice Jordan, Mark Jr. Tubre, John C. Klein, Shadoe Knight, Raymond Lapino, Cynthia LeBlanc, Elton LeBlanc, David Joseph Martinez, Linara Washington, Julia Adams, Rhonda Floyd Aguillard, Shannon Brewer, Edward J. Clare, Gregory Allen Gabroy, Joshua Joseph Gillum, Gene Kevin Hames Jr., Kirk Jordan, Adam Sibley, Logan Douglas Smith, Daniel Vincent, Glen Warner y Elvin Yoshida.
Premios
Seleccionada para la competición del Festival Internacional de Cine de Cannes.
Sinopsis
La interrupción de una partida de póker ilegal por parte de dos ladrones inexpertos, Frankie (Scoot McNairy) y Russell y Ben Mendelsohn) que sueñan con dar el golpe que los saque definitivamente de la pobreza, durante los días de la campaña presidencial de Barak Obama a la Casa Blanca, conseguirán hacerse con un botín importante de dinero. Pero se trata de una partida organizada por la mafia. Ésta, herida en su orgullo, contrata a Jackie CBrad Pitt)), un investigador privado y sicario ocasional, para que resuelva la situación y castigue a los responsables. Pero Cogan, un personaje en cierta forma descreído pero inteligente, acostumbrado a trabajos rápidos y sin complicaciones, se irán encontrando con una serie de personajes al borde de lo histérico, que dificultarán la situación y le llevarán al límite.
Comentario
En su intento de ser “el más original del lugar”, el neozelandés Andrew Dominik tira de nuevo la casa por la ventana, sin reparar en que a punto está aquí de quedarse en la calle. No acaba en la indigencia, por supuesto, recursos le sobran para salir a flote; pero nos deja la desagradable sensación de que lo suyo ha sido un falso envite. Está muy bien bombardear las lindes del género e inventarse un thriller “sui generis”, siempre y cuando de ese ímprobo esfuerzo surja un gran hallazgo, una perla cultivada. Cultivada, “Mátalos suavemente” está sin duda. Y defectuosa también. Porque el corsé de “cine de gangsters” revienta desde luego sus costuras, luego el propósito lo cubre, pero a base de desgarrar el encanto de la propuesta, de agradar un tanto primero y de cansar después, laminando finalmente la paciencia de los espectadores. Para entendernos: todo ese paralelismo político/moral que destila la historia, todas esas charlas y conversaciones (a veces, sí, de gran brillantez) se vienen abajo cuando terminan agotando al más paciente. Y lo peor de todo: que Dominik busca la singularidad pero su cantinela pronto nos trae a la memoria al ya más que experimentado Tarantino y, puestos a recordar con Brad Pitt delante, al propio Guy Ritchie de “Snatch, cerdos y diamantes”. Lo mejor, en todo caso, los actores,empezando por Pitt y Gandolfini. También algunos diálogos, algunas tomas estéticas, algunas “genialidades”. Y lo demás…pues un conato desesperado por ser rarito… y darse de bruces.