Intérpretes
Sinopsis
La pasión por la música de Vicente Martín y Soler (Toni Cantó) se gestó siendo un niño en Valencia, de la mano de Mosen Pasqual. Alentado por él, a los 18 se mudó a Madrid para vivir de la música; este fue el primer paso de una larga, exitosa y fructífera carrera que le llevó a vivir en Viena, Nápoles, Londres y San Petesburgo. Sus óperas y ballets triunfaron en todas las cortes europeas. Mozart (Sergio Caballero) le admiraba por ello. Con él compartió amigo y letrista, Lorenzo Da Ponte (Jorge Bosch). En este contexto, se narra la historia de amor de Martín y Soler con Graciela (Ariadna Cabrol), su amante, con la que nunca llegó a vivir, en gran parte por culpa de la madre de ésta, María Luisa Petralosa (Jacqueline del Arco), que envidiaba la bella voz de su hija. Hombre tremendamente sensible, divertido y vividor, Vicente Martín y Soler se casó con Olivia (Paula Garber), con la que tuvo dos hijos. Murió ejerciendo de profesor de música en la ciudad de San Petesburgo donde está enterrado y se conserva gran parte de su obra.