LOS BOXTROLLS (2014)

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    Titulo original: The Boxtrolls
    Año: 2014
    País: EE.UU.
    Duración: 97 min.
    Dirección: Graham Annable y Anthony Stacchi
    Guión: Irena Brignull y Adam Pava, basado en la novela "Here Be Monsters!", de Alan Snow.
    Música: Dario Marianelli. Temas musicales: “The Boxtrolls Song”, interpretado por Mark Orton and Loch Lomond; “Quattro Sabatinos”, interpretado por Peter Harris, Alex Tsilogiannis, Thomas Kennedy and Edmund Saddington; y “Little Boxes”, interpretado por Loch Lomond.

    Sinopsis

    Debajo de las encantadoras calles de Quesberg viven los Boxtrolls, unos seres desvergonzados que salen de las alcantarillas por la noche para hacerse con los bienes más preciados de los habitantes: sus hijos y sus quesos. Al menos, esa es la leyenda que todos creen. Pero en realidad, los Boxtrolls son una comunidad de inofensivos aunque extraños seres que habita un espacio cavernoso en el subsuelo y que llevan cajas de cartón reciclado como las tortugas su caparazón. Solo salen a la superficie de noche para recoger piezas mecánicas y chatarra que los habitantes han tirado. Los Boxtrolls han criado a un pequeño huérfano humano llamado EGGS desde su más tierna infancia y le han acostumbrado a una vida dedicada a rebuscar en las basuras para hacerse con los objetos más inútiles. Pero cuando el malvado exterminador de plagas Archibald Birlante decide erradicarlos, convencido de que solo así podrá formar parte de la alta sociedad de Quesberg, la amable y simpática panda de chatarreros deberá pedir ayuda a su hijo adoptivo y a una aventurera niña rica llamada Winnie para lanzar un puente entre dos mundos cambiantes… con olor a queso.

    Comentario

    Tercer largometraje de los Estudios Laika tras “Los mundos de Coraline” y “El alucinante mundo de Norman”. Los directores Graham Annable, Anthony Stacchi presentan una nueva familia, hasta ahora desconocida, los Boxtrolls, unos seres estrafalarios, fantásticos y traviesos que han criado a un niño humano, Eggs, desde que era un bebé, en el asombroso hogar subterráneo que han construido bajo las adoquinadas calles de Quesberg. Viven en armonía lejos de “la sociedad de arriba”, la elegante ciudad posvictoriana en la que sus habitantes viven obsesionados por el dinero, la clase y unos deliciosos – aunque apestosos – quesos.