Titulo original: La maladie de Sachs
Año: 1999
País: Francia
Duración: 107 min.
Dirección: Michel Deville.
Guión: Michel Deville y Rosalinde DeVille, basado en el libro La enfermedad de Sachs, de Martin Winkler.
Música:
Jean-Féry Rebel.
Intérpretes
Albert Dupontel, Valérie Dréville, Dominique Reymond, Martine Sarcey, Marianne Groves, Cécile Arnaud, Etienne Bierry, Catherine Boisgontier, Nathalie Boutefeu, Jean-Claude Bourbault, Delphine Brimbeuf, Christine Brücher, Michelle Brûlé, Béatrice Bruno, Gilles Charmot, Denis Chérer, Pierre Diot, Sandra Cheres, François Clavier, Claire Conty y Albert Delpy.
Sinopsis
La historia de la vida cotidiana de un médico rural enfrentado diariamente al sufrimiento, a la angustia, a la violencia de las relaciones humanas, a todo lo que le pone enfermo. La permeabilidad a este sufrimiento, que muy bien podría llamarse compasión, la rebeldía contra la arrogancia del saber médico, el sentimiento de su propia insuficiencia van enfermando en secreto al doctor, causando su propio síndrome, la enfermedad de Sachs. Con leves indicaciones, pequeños trazos, los pacientes esbozan el retrato del médico, al que vemos a través de las miradas de los demás, porque el doctor Sachs no afirma nada, él sólo escucha y, como multiplicado por el reflejo de unos espejos, el conjunto de las voces compone la historia: un mosaico de fragmentos de vida, alrededor de la consulta médica. El doctor Sachs escribe, porque la escritura es una terapia, o un analgésico, pero, además, conoce a Pauline, y aprende a no volver a sentir miedo del sufrimiento, porque es inevitable, ni de la felicidad, porque es posible alcanzarla.
Comentario
Película de Michel Deville, veterano autor de películas como La lectora, que ganó la Concha de Plata en el Festival de Cine de San Sebastián 1999. Se basa en la historia real de un médico a la antigua, el doctor Sachs, cuyo insólito método consiste en oír las historias de sus pacientes y dedicarles tiempo, que fue recogido en una novela de Martin Winkler (médico y escritor), que se convirtió en un best seller en Francia. A destacar el excelente retrato de un hombre conmovedor que tiene frente a él a una serie de personajes, sus pacientes, muy interesantes. Una comedia humana sobre la incomunicación y la soledad.