En el transcurso de la Primera Guerra Mundial, una patrulla del ejército británico cruza el desierto de Mesopotamia. Al frente va el oficial británico al mando, a quién un disparo desde el horizonte, por unos bandidos ocultos, le deja sin vida. El fallecido era el único del pelotón que conocía la misión a emprender y la ruta. Perdida, la patrulla, ahora al mando de un inflexible sargento (Victor McLaglen) que no perdona la indisciplina, decide ir hacia el norte. Una noche paran en un oasis y a la mañana siguiente se encuentran al centinela muerto, los caballos robados y el oasis cercado. La patrulla se verá presa del el terror, pues el invisible enemigo árabe va matando, uno a uno, a los miembros del cada día más reducido grupo. La situación de los supervivientes, que no saben a donde dirigirse, comienza a ser desesperada y ni siquiera el aterrizaje forzoso de un avión y la estúpida conducta de su piloto pueden rescatarles de la situación de peligro que están viviendo.
Inicio LA PATRULLA PERDIDA (1934)