Kyle Eastwood y Michael Stevens.
Temas musicales: “Colorblind» y «Invictus 9,000 Days»
Intérpretes
Premios
Globos de Oro: Nominada al Globo de Oro al Mejor Actor en una Película Dramática (Morgan Freeman), al Mejor Actor Secundario (Matt Damon) y al Mejor Director.
Premios Oscar: Nominada al Oscar al Mejor Actor Protagonista (Morgan Freeman) y al Mejor Actor Secundario (Matt Damon).
Sinopsis
Nelson Mandela (Morgan Freeman) es liberado tras 27 años en prisión, por las autoridades surafricanas. Cuatro años después, una vez derogado el apartheid, es elegido presidente de su mais ante el delirios de los negros y los recelos de los blancos. El recién elegido Presidente Mandela sabe que, tras el apartheid, su país sigue dividido racial y económicamente. Su primera acción el primer día en que llega a su despacho presidencial es reunir a todos los funcionarios y asegurarles que, los que quieran permanecer con él, no van a tener el menor problema. Esto incluye a sus escoltas personales, los negros que tenía desde su salida de la cárcel, y los blancos, que lo habían sido del anterior presidente. Pronto se pregunta que puede hacer para que todos los ciudadanos acepten la realidad multirracial evitanto que Suráfrica se divida en dos bandos irreconciliables. Durante un encuentro de rugby del equipo nacional, los Springboks, integrado mayoritariamente por blancos, que durante décadas había sido la bandera de la sociedad del apartheid, percibe que los espectadores negros desaprueban al equipo y que sus simpatías van siempre con sus rivales. Con la confianza de que puede reconciliar a su pueblo mediante el lenguaje universal del deporte, Mandela se une al débil equipo sudafricano de rugby, con un juego desastroso y a punto de desaparecer como tal, cuando, Suráfrica es designada sede del Campeonato Mundial de Rugby de 1995, con el equipo, como representante del país anfitrión, clasificado automáticamente para jugar el campeonato. Mandela se cita con François Pienaar (Matt Damon), el capitán del equipo.Su intención, aunque no directa, es muy clara: el deporte puede unificar al país y una victoria será suficiente para dar el primer paso. Pienaar, a pesar de cierta resistencia entre sus compañeros, entiende el mensaje y da lo mejhor de sí para que la selección obtenga un buen resultado, algo de lo que todos dudan porque el equipo juega mal, ha perdidos casi todos sus partidos y dadie apuesta nada por él. Junto a unos durísimos entrenamientos, los jugadores empiezan a visitar los anitiguos ghettos negros y explican el deporte a los jóvenes del lugar. Superando alguna que otra crisis como la lesión del único jugador negro del equipo o un colapso del propio Mandela, el equipo, de forma inesperada, consigue llegar a la Final de la Copa del Mundo de Rugby de 1995.