Titulo original: Arbitrage
Año: 2012
País: EE.UU.
Duración: 107 min.
Dirección: Nicholas Jarecki
Guión: Nicholas Jarecki
Música:
Cliff Martinez.
Temas musicales: So Soft", interpretado por Gary Anderson; "Riding Along", interpretado por Gary Anderson; "Impromptu in B Flat Major", de Franz Schubert, interpretado por Maria Callas; "Pra Machucar Meu Coracao", interpretado por Stan Getz, Antonio Carlos Jobim y Joao Gilberto; "The Loneliest Man West of the Humber", interpretado por Jason Fowler; "Laura Palmer s Prom", interpretado por You Say Party!; "Symphonia IX (my wait is u)", interpretado por Grimes; "Just One More Chance", interpretado por Billie Holiday, Ray Ellis and Orchestra; "Made In Ofra", interpretado por Edwar El Tanque; "Manhattan Cocktail", interpretado por Gary Williamson (piano), Scott Alexander (bajo), Bob McLaren (batería); "My Foolish Heart", interpretado por Robi Botos (piano), Morgan Childs (batería) y Morgan Downes (bajo); y "I See Who You Are", interpretado por Bjork.
Intérpretes
Richard Gere, Susan Sarandon, Tim Roth, Brit Marling, Laetitia Casta, Nate Parker, Stuart Margolin, Chris Eigeman, Graydon Carter, Bruce Altman, Larry Pine, Curtiss Cook, Reg E. Cathey, Felix Solis, Tibor Feldman, Austin Lysy, Monica Raymund, Gabrielle Lazure, Shawn Elliott, Sophie Curtis, Ted Neustadt, Maria Bartiromo, David Faber, Josh Pais, Paul Fitzgerald, Julian Niccolini, Evelina Turen, Alyssa Sutherland, Paula Devicq, Io Bottoms, Zack Robidas, Betsy Aidem, Sam Kitchin, Glen Lee, Jennifer Lee Crowl, Quinn Friedman, Olivia Salerno, Tyler Turen, Michael Leif O Brien, Angel Picard-Ami, Jamie Johnson, Jennifer Butler, Fabrizia Dal Farra, Marshall Factora, James Farley, Pete Fasanelli, William Friedkin, Darryl Reuben Hall, Rachel Heller, Alex Kruz, Nicole Roderick, Jenny Rostain, Lipica Shah, Barbara Vincent, Darly Wanatick, Paul Weaver y William Henderson White.
Premios
Película de apertura del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
Nominada al Globo de Oro al Mejor Actor Dramático (Richard Gere)
Sinopsis
Robert Miller (Richard Gere) es un magnate que en la víspera de su 60 cumpleaños parece el perfecto retrato del éxito americano en su vida profesional y familiar, siempre acompañado por su fiel mujer Ellen (Susan Sarandon) y Brooke (Brit Marling), su hija y heredera de su imperio. Pero tras los dorados muros de su mansión, Miller está con el agua al cuello, desesperado por completar la venta de su imperio a un gran banco antes de que quede expuesto un fraude que ha cometido. Además, mantiene un romance con una marchante de arte francesa (Laetitia Casta) a espaldas de su mujer y su hija. Justo cuando se dispone a deshacerse de su problemático imperio, un sangriento e inesperado error le obliga a reencontrarse con un fantasma de su pasado y a enfrentarse a los límites de su doble moral.
Comentario
Vayamos por partes. Porque tras la apariencia de cuento moral o parábola contemporánea de aspiraciones trascendentales “El fraude” esconde primero, y exhibe más tarde, unos cuantos artilugios –buenos unos, otros regulares- que justamente por eso le dan lustre a ratos. Y a ratos le dan más bien una imagen pobre… para entendernos: que al quasi principiante Nicholas Jarecki la cosa no le ha salido del todo mal, pero lo suyo tampoco es, la verdad, para tirar cohetes. Tiene “El fraude” de entrada demasiadas similitudes con una buena colección de películas que recorrieron antes que ella, mucho antes, ese transitado tramo urbano del “Mahattan de los mejores negocios y los peores depredadores”. No los vamos a recordar ahora. Claro que aquí han llovido los dólares, la producción ha sido generosa y, claro, los resultados tirando a elegantes. Y son precisamente las formas, las que salvan al director, ese aspecto impecable del mundillo del éxito, lo que le presta una factura aceptable. Así que, por fuera, bien. Pero por dentro, las piezas no ajustan, el traje tira por todas sus costuras, el guión no permite creernos a ninguno de sus personajes, demasiado tópicos, clichés más que de libro, de periódico sepia, luego nada originales. Sarandon hace lo que puede con la señora que le cae en suerte. Y en cuanto a Richard Gere… pues que la historia le viene como anillo al dedo: glamour, atractivo, un aspecto impecable…pero también intrascendente.Tal cual, él.