Intérpretes
Sinopsis
En febrero de 2001, el conocido agente del FBI Robert Hanssen (Chris Cooper) fue declarado culpable de traición contra los Estados Unidos. Durante más de dos décadas, Hanssen vendió secretos clave de inteligencia a la antigua Unión Soviética deliberada y sistemáticamente. Eric O’Neill (Ryan Phillipe) un joven agente en prácticas seleccionado por el FBI, es convencido por su jefa Kate Burroughs (Laura Linney) para ayudar a descubrir a Hanssen, considerado por muchos una leyenda del departamento, con las manos en la masa, aunque a O’Neill Burroughs no le confiesa la verdad, sino que se trata de pillarle con las manbos en la masa de algún escándalo sexual. Pronto O’Neill es seleccionado para trabajar para el conocido operativo Hanssen dentro de “seguridad de información”, una nueva división creada para proteger toda la inteligencia clasificada del FBI. Cuando Hanssen se entera que Eric es católico le toma bajo su protección lo que facilita las cosas. Hanssen le invita junto a su esposa juliana (Caroline Dhavernas) a conocer a su mujer Bonnie (Kathlenn Quinlan) en una velada tras la asistencia a misa. Pronto O’Neill se da cuenta que a Hanssen le interesa la pornografía, confesándoselo a Burroughs quién le desvela que Hanssen es un doble agente, pidiéndole que cultive su amistad para obtener más pruebas que le involucren en su traición. Hanssen es el único objetivo de una investigación larga y de alto secreto; es sospechoso de ser un topo que se ha convertido en extremadamente peligroso por la importancia puramente global de la información que protege. El FBI pide a O’Neill que utilice la creciente confianza que Hanssen tiene en el aprendiz para hacer salir poco a poco al traidor de la madriguera. Ahora, involucrado en un juego letal de espía contra espía, O’Neill se ve luchando para detener a Hanssen antes de que el agente doble traidor pueda destruirlo a él, su familia y la nación que han jurado servir.