Se presenta en Madrid el Centro de Conservación y Restauración de la Filmoteca Española
El Centro de Conservación y Restauración de la Filmoteca Española ya es una realidad. La nueva sede de la institución, que ha contado con una inversión de 23 millones de euros, tiene claro sus objetivos: conservar, restaurar, preservar y difundir los fondos documentales de nuestra cinematografía.
Las instalaciones del centro, situadas en la Ciudad de la Imagen, en Pozuelo de Alarcón (Madrid), han sido presentadas este miércoles 17 de diciembre por el secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, en un acto en el que ha estado acompañado por el director de la Filmoteca Española, José María Prado; y el arquitecto Víctor López Cotelo.
Con una superficie construida de 15.429 metros cuadrados, de los que dos tercios son subterráneos, el centro cuenta con instalaciones de almacenamiento, distribuidas en archivos, servicios técnicos y administrativos e instalaciones de climatización, conocidas como «vagón de climatización».
«Bajo tierra están las películas; sobre tierra la investigación y la recuperación», ha declarado el que ha sido jefe de investigación de los fondos fílmicos de la Filmoteca, Alfonso del Amo.
A finales de los años noventa se lanzaron «las líneas de investigación para conocer las condiciones más adecuadas de conservación de estos documentos hechos con acetato de celulosa y para los que se precisaba la exacta combinación de humedad, temperatura, ventilación y estabilidad», ha recordado Del Amo.
El traslado de todo el patrimonio fílmico a las nuevas instalaciones, cuyas obras se iniciaron en 2009 y acabaron tres años después, «no se completarán probablemente hasta 2016, ya que hay 300.000 bobinas en diferentes almacenamientos», ha explicado el director de la Filmoteca.
Desde 2006, ha destacado el responsable de recuperación de estos fondos, Ramón Rubio, se empezaron a recoger negativos cuyas condiciones de mantenimiento eran muy deficientes, en cajas oxidadas y con películas muy deterioradas. Ahora se han recopilado 50.000, de los que el 80% por ciento son de cine español.
El bloque de archivos es el núcleo de las instalaciones de este centro, concebido como «una caja dentro de otra caja» aislada del terreno, en el que hay 36 almacenes.
En estos depósitos se conservan los miles de cintas que, dependiendo de su tipología, se mantienen a temperaturas que pueden llegar a los cinco grados para los negativos de película en color, que son los más delicados, y entre los que se encuentran los 70.000 negativos del archivo del NODO.
Entre los fondos están las colecciones Sagarminaga y Tramullas, que guardan películas realizadas desde 1896 a 1908, la primera, y desde 1910 a 1927, la segunda. También hay archivos filmados sobre la Guerra Civil española, la colección Daniel Jorro (de reportajes rodados en 16 milímetros entre los años 1930-1955) y colecciones procedentes de la Escuela de Cine (EOC), de cine amateur (realizadas por cineastas aficionados en 8, Súper 8, 9,5 y 16 milímetros) y de las colecciones en vídeo de TVE relacionadas con el programa ‘La noche del cine español’, con todas las entrevistas a personalidades relevantes de la cinematografía española realizadas por Fernando Méndez-Leite.