«The Vatican Connection» adaptará el best seller homónimo de Richard Hammer
El cineasta británico Michael Winterbottom tiene en su haber dos sellos de identidad: parece moverse como pez en el agua en cualquier género que intente tocar, está dispuesto a probarlos todos, y no le teme a ningún tema por controversial que sea. Si no le asustó hacer uno de los primeros docudramas sobre Guantánamo, ahora asume otro desafío: corrupción e intrigas palaciegas en el mismísimo Vaticano. Y no se trata totalmente de ficción, al menos hay un libro basado en hechos reales detrás, que tiene que ver con el blanqueo de dinero mafioso por la banca de la Santa Sede.
Con una amplia carrera como director, los mejores trabajos de Winterbottom se camuflan entre otras cintas de un corte más mediocre, debido a su incansable carrera en la cual suma un título por año de media. Ahora, con «The Face of an Angel” pendiente de estreno y la miniserie de seis capítulos para televisión como última obra estrenada, anuncia su nuevo proyecto, un film que expone los lazos existentes entre el Vaticano y diversos grupos de la mafia italiana.
La cinta estará basada en el best-seller escrito por Richard Hammer titulado «The Vatican Connection». El guión, que ya fue adaptado por Alessandro Camon, está siendo reescrito por Paul Viragh, que trabaja directamente sobre la adaptación de Camon. La historia se centra en la historia real de Joe Coffey, un detective neoyorquino que descubre una red que vincula a la Santa Sede con las principales mafias de los años 70 y que trata sobre diferentes operaciones en el Banco Vaticano o Instituto de las Obras de Religión (IOR) que podrían suponían un lavado de cantidades ingentes de dinero negro proveniente de actividades delictivas y que contaban con la complicidad de altos cargos de la Iglesia católica.
Sirviendo de precedente, el Papa Francisco ha reestructurado el IOR para adecuarlo a las normas de la Unión Europea que piden medidas mucho más estrictas hacia este tipo de delitos. Aún así, la polémica saltó en 1983 con la publicación del libro de Hummer y dura hasta el día de hoy donde casos como este, junto a otros vinculados a escándalos sexuales y delitos de abusos de menores, han minado mucho la imagen pública de una Iglesia que atraviesa una enorme crisis de Fe en Occidente.
No exento de avidez por la polémica, el cineasta británico se pone a los mandos de este thriller para denunciar, como ha ocurrido con anterioridad en su carrera, los casos de corrupción que asolan los puntos altos de la estructura democrática actual. Ya lo hizo en 2006 cuando presentó en la 56 edición del Festival de cine de Berlín su película «Camino a Guantánamo” en la que uniendo imágenes de archivo, entrevistas y secuencias de ficción, Winterbottom mostraba el doloroso relato de cuatro ciudadanos ingleses de religión musulmana que fueron encarcelados y torturados en la prisión de Guantánamo acusados de terrorismo contra Estados Unidos.
Sin embargo, Winterbottom destaca por su versatilidad para moverse entre géneros, entre los que no sólo destacan las críticas al sistema político. Acostumbrado a llevar personajes cercanos a la crisis interna por pensamientos que los torturan, sus cintas han coqueteado con el sexo, las drogas y las alucinaciones.