«Reiniciando» es una obra sobre el confinamiento durante la pandemia, pero contiene otras cosas, como el valor de la amistad y de la familia, el amor/desamor, los encuentros y desencuentros, el dolor por la pérdida. Se trata, sobre todo, de un espectáculo lleno de buenas intenciones. Se ha estrenado en los teatros Luchana de Madrid, dirigido por Paco Rodríguez, con texto e interpretación de Bernardo Rivera. Hay momentos de humor, otros de emoción, y alguno de peligroso vacío y repetición que habría que moldear. Esto último no parece una cuestión insalvable, porque «Reiniciando» puede tener larga vida.
El joven dramaturgo y actor sevillano Bernardo Rivera encarna a tres personajes. Cada uno está en el salón de su casa, confinado, con sus miedos, angustias, soledad y proyectos. Lucas, un periodista andaluz harto de su trabajo; Valeria, actriz con anhelos de escritora; y Santi, que se halla en Londres ejerciendo de ingeniero pero perderá su empleo. La acción transcurre desde el día en el que se decretó el estado de alarma en España, el 14 de marzo de 2020, hasta el momento actual en el que la función se estrena en los teatros Luchana. Gustan las menciones al proceso de aquella pesadilla, que la memoria de los espectadores, consciente o inconscientemente, comienza a esconder. Como las palabras en off del presidente Pedro Sánchez explicando el decreto. Parecían al principio simplemente 15 días de encierro. Pero no. Santi afirma: «Aquí a Londres no ha llegado nada. No somos Italia». Pasarán las semanas. Y llegarán «las fases». Santi y Valeria, hermanos, pierden a su padre. «A mi padre se lo llevaron al hospital. No salió vivo de la UCI. Y mi hermano en Londres, sin poder verlo», cuenta Valeria.
Bernardo Rivera despliega un interesante ejercicio actoral. Y Paco Rodríguez inyecta vigor y agilidad a lo que ocurre en el escenario. Hay reflexiones sobre la dificultad y fragilidad de la profesión de artista. Y ratos de emoción. Hay momentos de buen teatro. Una sonrisa con un punto de melancolía a lo que nos está tocando vivir.
