Coincidiendo con el 40 aniversario del asesinato de John Lennon, repasamos las películas que hicieron los Beatles, juntos o por separado, y las que, inspiradas en el cuarteto de Liverpool se han hecho con posterioridad a la disolución del grupo.

Las películas Beatles

A principios de los años 60, todas las estrellas de la música popular buscaban hacer sus pinitos en cine, aunque con desigual éxito. Lo había hecho Elvis Prestley y otros ídolos musicales en Estados Unidos, y la moda se contagiaba a Inglaterra donde ya había debutado en el cine Cliff Richard. Los máximos ídolos británicos, The Beatles, no tardaron en recibir una oferta cinematográfica. Llegó por parte del productor estadounidense Walter Shenson en octubre de 1963 a Brian Epstein, mánager del cuarteto británico, para que hicieran una película para la United Artists británica con el reducido presupuesto de 189.000 libras. Epstein, aun pardillo en el tema de las negociaciones, cerró un acuerdo por un total de tres películas a lo largo de cinco años. Epstein pensaba que el fenómeno Beatle iba a ser efímero, y más valdría asegurarse un contrato durante un lustro. Lo cierto es que la United Artists tampoco confiaba mucho en el éxito de las películas de los chicos de Liverpool, pero sí en las bandas sonoras que saliesen de las películas. Y ahí si la productora vio el negocio. Pero entre octubre de 1963 y el 2 de marzo de 1964, fecha en que comenzó el rodaje de aquella primera película, el mundo musical sufrió una revolución: Había estallado la beatlelmanía y en seis meses todo lo que tocaban John, Paul, George y Rinco se convertía en oro. Y “¡Qué noche la de aquel día!” se convirtió desde el primer día de rodaje en un fenómeno mundial.

“¡Que noche la de aquel día!” (1964) la dirigió Richard Lester, un director de spots publicitarios nacido en Filadelfia en 1932, antiguo afinador de pianos que evolucionó a concertista de clarinete y actor cómico e intérprete de canciones en la BBC, trasplantado que buscaba meter la cabeza en la industria cinematográfica británica. En 1962 había dirigido una película musical, “It’s Trad, Dad” al servicio de un ídolo del momento, la cantante adolescente Helen Shapiro. Y había firmado también la comedia “Un ratón en la Luna”, lo que le daba solvencia para la empresa que se encomendaba.

La película adopta el estilo verista de un falso documental, siguiendo un día en la vida de John (John Lennon), Paul (Paul McCartney), George (George Harrison) y Ringo (Ringo Starr) mientras la fama les abruma. Viajan en tren desde Liverpool a Londres con motivo de una actuación en un programa de televisión que se grabará en un teatro lleno de público. Con ellos viaja El abuelo de Paul (Wilfrid Brambell) y el manager del grupo que intenta poner algo de disciplina. Por primera vez, han decidido saltarse las reglas y durante las próximas 24 horas, planean tirar por la ventana el programa, ignorar las obligaciones y simplemente saborear la libertad. Tendrán que dar esquinazo a sus histéricos admiradores, evitar a los periodistas, desobedecer a su mánager, y tratar de tener controlado al abuelo. La película también ofrece una fantástica actuación televisiva del grupo, mostrado la beatlemania en todo su esplendor, todo un documento de las pasiones, llantos e histeria colectiva que despertaban los Beatles.

El resultado es una película mítica con una inolvidable banda sonora con el álbum que da título al filme, que resultó una de las más grandes comedias de aventuras con rock and roll. Y en ella Richard Lester sentó las bases de lo que con los años serán los videoclips musicales.

En 1965 The Beatles habían realizado una inolvidable gira por Estados Unidos desatando la locura colectiva. Y no pararon de recibir ofertas cinematográficas, pero seguían atados por el contrato firmado por Epstein. Para su segunda película, “¡Socorro!” se volvió contar con Richard Lester, pero ahora con un amplio presupuesto. Aquí The Beatles se ven envueltos en una trama que gira alrededor de un anillo que Ringo posee y que no puede sacárselo del dedo. Tanto él como sus compañeros de grupo, serán perseguidos por miembros de una secta religiosa, un científico loco y la Policía londinense a lo largo de un periplo que los llevará desde Londres hasta las Bahamas, pasando por los Alpes austríacos, todo en una interminable sucesión de gags. La película sirvió de apoyo al lanzamiento del nuevo álbum del grupo, “Help!”.

En 1966 los Beatles deciden tomarse un respiro y replantar sus trabajos en el cine. Y la televisión viene en su ayuda. Y en los primeros meses de 1967 ruedan “Magical Mystery Tour”, un mediometraje para la televisión a partir de una idea de Paul McCartney, que dirigieron ellos mismos. Cuenta la experiencia de un grupo de turistas que se dispone a realizar un tour en autobús por Inglaterra. Los protagonistas son el señor Richard Starkey, papel interpretado por el Beatle Ringo Starr, y su tía recién enviudada Jessie Starkey, papel interpretado por la actriz Jessie Robins. Durante el recorrido, Starkey y su tía discuten constantemente. Mientras tanto, ella se enamora de Buster Bloodvessel, quien manifiesta un comportamiento excéntrico, no se pierde ningún viaje y cree que es uno de los guías.

Pero The Beatles seguían obligados por contrato a una tercera película, pero la experiencia de “Magical Mystery Tour” y sus malas críticas, les quitaron las ganas de un nuevo largometraje. En estados Unidos se había hecho una serie de animación sobre los Beatles y Epstein pensó que ahí estaba la solución. Una película de animación, con una potente banda sonora: “El submarino amarillo” (1968). Y con muchos guiños cinematográficos, de King Kong a Marilyn Monroe. Dirigida por George Dunning en 1968, el filme se presenta como una vanguardista película de animación en la que su imagen real de los Beatles solo aparece unos segundos al final del filme. La película supuso una enorme innovación en el cine de animación de la época, con una estética pop y psicodélica acompañada por las inolvidables canciones de The Beatles. El argumento narra las peripecias de unos Beatles dibujados, sobre un universo irreal de deslumbrantes fantasías psicodélicas, con seres y espacios evocadores de esta estética.

En 1969 comienzan los rumores sobre una posible separación de The Beatles. Apple, la compañía que habían creado estaba al borde de la bancarrota, el grupo había dejado de actuar en directo y las discusiones entre los cuatro eran constantes. Deciden entonces hacer una nueva película que se concibe como un documental, “Let it Be”, sobre el trabajo creativo del grupo. Además, buscaron zanjar el contrato cinematográfico que había firmado Briam Epstein, ya que la United Artists no consideró que con “El submarino amarillo” quedaba liquidado en contrato. Contrataron al neoyorquino Michael Lindsay Hogg como director que buscó motivar al grupo por la película. En ella se muestra por un lado los ensayos y forma de componer y después en la terraza de Apple, en la famosa calle Abbey Road de Londres. Pero en el filme se cuelan las discusiones entre ellos, la permanente presencia de sus mujeres (la presencia de Yoko Ono llegó a irritar sobremanera a los fans del grupo acusándola de ser la culpable de la separación de Los Beatles, lo que no era cierto).  La película se rueda en enero de 1969 pero se estrena en mayo de 1970, cuando The Beatles ya se han disuelto.

Al margen de los cuatro largometrajes oficiales y el mediometraje televisivo a los cuatro Beatles se les puede ver en el documental de Ron Howard “The Beatles: Eight Days a Week – The Touring Years”, en donde se muestran muchas de las interioridades del grupo de Liverpool e incluye desde sus primeras actuaciones en The Cavern Club hasta su último concierto en Candlestick Park (San Francisco).

Sus trabajos individuales

Los cuatro músicos participaron individualmente por su cuenta en otras tantas películas. John Lennon rodó en 1966 en España “Como gané la guerra” (1967), de nuevo a las órdenes de Richard Lester, con un papel secundario. Lennon rodaría con Yoko Ono bastantes cortometrajes y “Imagine, The Film’ (1971) que dirigió la pareja. Y en 1988 se realiza ‘Imagine: John Lennon”, que dirigió Andrew Solt, que utiliza más de 200 horas de grabación para confeccionar una película de casi 100 minutos que reúne imágenes inéditas de Lennon, sus clips y canciones, y multitud de opiniones y compañeros y amigos.. Y en 2006 se hace el documental “Los EE.UU. contra John Lennon”.

Con Paul McCartney se hizo en 1984 “Recuerdos de Broad Street”, que dirigió Peter Webb. Un año después Paul produciría el largometraje de animación infantil “Rupert the Bear”, de Geoff Dumbar. George Harrison destacó como productor (fue productor de “La vida de Brian” y creo su propia productora, Handmade Films. Y es uno de los músicos que interviene en “Concierto para Bangla Desh” (1971), un documental sobre un concierto auspiciado por él. En 2011 Martin Scorsese creó el documental “George Harrison. Living om the Material World”, con imágenes y grabaciones inéditas, el documental del oscarizado Martin Scorsese discurre desde el nacimiento de George Harrison en 1943 hasta su muerte en 2001

Ringo Starr si se tomó más en serio su trabajo como actor: “Candy” (1967), “Si quieres ser millonario no malgastes el tiempo trabajando” (1969), “El justiciero ciego” (1971), “200 motels” (1971) donde se transmuta en Frank Zappa, Son of Dracula” (1972), “Born to Boogie?”, un documental sobre Marc Bolan, líder de T Rex, que dirige el propio Ringo, “That’ll be the day” (1973), “Lisztomanía” (1975), de Ken Russell, “El último vals” (1977) el famoso concierto sobre The Band de Martin Scorsese, “Sextete” (1978),con Mae West o “Cavernícola” (1980)

En torno a los Beatles

También se debe hacer mención a las películas Beatles pero sin los Beatles como “Todo esto y la segunda guerra mundial” (1976), “Sgt Pepper’s Lonely Hearst Club Band” (1977), “Locos por ellos” (1978) de Robert Zemeckis que recrea el día que The Beatles llegaron a Nueva York, “El nacimiento de los Beatles” (1979, de Richard Marquand), la polaca “Yesterday” (1988, que ganó el Festival de San Sebastián), , la también titulada “Yesterday”, de Danny Boyle (2019), ‘Backbeat’ (1993), “Nowhere Boy” (2008), “All Tegether No”,  (2008). Y no hay que olvidar las españolas “El amor perjudica seriamente la salud”, de Manuel Gómez Pereira o “Vivir es fácil con los ojos cerrados”, de David Trueba. En este apartado hispano se encuadraría el mediometraje de Pedro Costa “¡Qué vienen los Beatles”, sobre la vista del grupo de Liverpool a Madrid con imágenes descartadas del Nodo donde junto a famosos artistas de la época que acudieron a verles actuar en Las Ventas (Massiel, Miguel Ríos, Micky) se pueden ver las únicas imágenes de aquella actuación y a descubrir a una quinceañera que llegó hasta Barajas y se coló entre ellos. Era la que después sería la famosa actriz Marta Fernández Muro.