UN HOMBRE DE CINE. TEDY VILLALBA

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    Autor: SOL CARNICERO
    Editorial: EDITORIAL SIAL PIGMALIÓN. 406 PAGS.
    Estilo: Color
    Páginas: 406
    Precio: 30€

    Sinopsis

    Tedy Villalba era nieto e hijo de profesionales del cine. Productor e impulsor de la Escuela de Cine de Madrid y de la Academia de Cine, en cuyo embrión participó junto a otras personalidades cinematográficas el 12 de noviembre de 1985, Villalba trabajó veinticinco años para pesos pesados que rodaban en nuestro país -Orson Welles, Nicholas Ray, King Vidor, David Lean, John Huston y Stanley Kubrick, entre otros- y respaldó dos trabajos de Pedro Almodóvar.

    Los estudiosos del cine que estén interesados en saber qué ocurría en España en el ambiente cinematográfico de la segunda mitad del siglo XX y los comienzos del XXI, se encontrarán con Tedy Villalba en uno u otro momento.

    Nació en un estudio de cine y dedicó su vida al arte de hacer películas. Se inició con su padre en los estudios de Aranjuez, Chamartín y Sevilla Fims, participó en casi todas las grandes superproducciones que se rodaron en nuestro país: «Alejandro Magno», «Orgullo y pasión», «Espartaco»…, fue pieza clave en el equipo de Samuel Bronston interviniendo en «Rey de Reyes», «El Cid», «La caída del Imperio Romano», «55 días en Pekín», «El fabuloso mundo del circo»… Y también en «Lawrence de Arabia», «Doctor Zhivago», «Patton» o «La Gran Esperanza Blanca».

    Trató de cerca a Ernest Hemingway, trabó amistad con mitos tan inalcanzables como Orson Welles, Frank Sinatra, Ava Gardner, Yul Brinner… Creó su propia productora, fue de gran ayuda en los inicios de cineastas como Pedro Almodóvar. Alma y vigía de la Academia de Cine, Gerente de la Escuela de Cine de la Comunidad de Madrid, Tedy llevaba el celuloide en la sangre. Siempre se sintió orgulloso de pertenecer a la familia del cine. El libro es, en resumen, la memoria de Tedy Villalba «sin cambiar nada, tal y como se lo contó” a Sol Carnicero.

    La autora Sol Carnicero ha estado casi cuarenta años dedicada a la producción cinematográfica. Su primera intervención en el cine fue como secretaria de producción en «La Residencia», la película de Ibáñez Serrador. Ya como directora de producción tiene a su cargo títulos como «El crimen de Cuenca», «Gary Cooper que estás en los cielos», «La Escopeta Nacional», «Patrimonio Nacional», «Las bicicletas son para el verano», «La Vaquilla», «Pasodoble», «Esquilache», «Besos para todos», «Horas de luz» o «Maktub», entre otras, habiendo obtenido el Premio Goya a la mejor dirección de producción en 1988 por «Cara de Acelga». Miembro fundador de la Academia de Cine, de la que es vocal en la actualidad por la especialidad de Dirección de Producción.