CHINA Y ESPAÑA PROTAGONIZAN LA JORNADA DEL MARTES EN LA SEMINCI
Si de algo presume Javier Angulo, director de la SEMINCI, es de las apuestas arriesgadas dentro de la Sección Oficial, algo que ha quedado patente con la única representante española: «El Arca de Noé”. La película ha sido acogida con un sonoro pataleo y algún que otro enfervorecido aplauso, aunque ya se sabe que la prensa no siempre coincide con los gustos del respetable.
«El Arca de Noé” está codirigida por los valencianos Adán Aliaga y David Valero y es un ensayo hermético sobre tres personajes atrapados en un futuro no demasiado lejano donde sobreviven a una gran crisis económica que va más allá de lo meramente material.
Tal y como han explicado los propios directores la cinta parte de una crisis personal muy concreta y de la que ambos proponen realizar un ejercicio «muy libre, trabajando con gente con la que nos sentíamos conectados”.
La película, según sus creadores, posee varias capas de lectura y dejan que sea el espectador el que haga suya la cinta en función de sus propias vivencias. Tal y como aseguran los directores «se trata de una película difícil y venimos preparados para lo que pase”.
Si la película española ha sido recogida con bastante frialdad, «Regreso a casa”, la última película de Zhang Yimou, ha sido fuertemente ovacionada. La película cuenta la historia de Lu Yanshi y Feng Wanyu, una pareja muy enamorada que sufre la separación forzosa cuando el marido es deportado a un campo de trabajo por delitos coincidiendo con la Revolución Cultural. Al regresar descubrirá que su mujer sufre amnesia y que es incapaz de reconocerle. La película está protagonizada por Gong Li, que vuelve a demostrar por qué es una de las mejores actrices asiáticas de todos los tiempos.”Regreso a casa” es un sólido melodrama repleto de delicados detalles que han emocionado y convencido a un público muy aficionado y familiarizado con el realizador chino. En 1990 Zhang Yimou ya fue premiado en el Festival de Cine de Valladolid con la Espiga de Oro por «La semilla de crisantemo” y volvió a estar en competición con «Happy Times” en 2002, obteniendo el premio especial del jurado FIPRESCI.
La jornada de hoy se cierra con la proyección, fuera de competición, de «The angriest man in Brooklyn”, que tiene como reclamo el haber sido uno de los últimos trabajos de Robin Williams, fallecido el pasado 11 de agosto. La película cuenta cómo tras comunicarle al protagonista que padece una grave enfermedad incurable, éste se propone solucionar pequeñas cuentas pendientes con su entorno familiar y afectivo. Sin duda, una broma amarga del destino.