Dos producciones catalanas, «L’altra frontera», de André Cruz Shiraiwa, y «Asmodexia», la ópera prima de Marc Carreté, completan la jornada
Los ladridos de perro ensordecen Sitges con la presentación de la esperada experimentación en 3D del maestro Jean-Luc Godard: «Adieu au langage». Ha sido una jornada de incuestionable toque francés (también se ha exhibido «Aux yeux des vivants», de Julien Maury y Alexandre Bustillo) y catalán, ya que se ha estrenado «Asmodexia», de Marc Carreté i se ha presentado «L’altra frontera», de André Cruz Shiraiwa y protagonizada por Ariadna Gil.
La sofisticada obra de Godard llega hoy llena de metáforas y sugerencias para situar el Festival en los límites del género. En este trabajo, Godard hace una investigación de algunos de los temas y exploraciones estéticas de su filmografía a través del 3D, en un film que incluye un hombre y una mujer que deambulan por una casa y un perro en el que recae todo el peso simbólico e intelectual de la obra.
Las instalaciones del Festival han sido el escenario donde la muñeca de «Annabelle» se ha paseado para acompañar la nueva película de John Leonetti. La precuela de «Expediente Warren: The Conjuring», dirigida por James Wan y en la que Leonetti trabajó como director de fotografía, ha llegado para explicar la historia de la muñeca que salía el el prólogo del film de Wan, que ha sido uno de los fenómenos sobrenaturales más documentados del siglo XX.
Pero este miércoles 8 de octubre ha sido un día de protagonismo para las producciones catalanas. Además de «REC 4» y «La distancia», Sitges 2014 ha programado «L’altra frontera», de André Cruz Shiraiwa, que ha definido su trabajo como «un drama intimista en un contexto totalmente distópico» que explora el concepto de la frontera como límite definitorio de «lo que es bueno y lo que es malo» o como el lugar «donde acaba la locura de unos y empieza la de otros». En esta película, Cruz ha querido exponer su punto de vista disconforme con una sociedad «de apariencias donde todo lo que nos rodea está pervertido por el capital» y donde los valores están «bastante perjudicados». Todo narrado como un reality show televisivo.
«L’altra frontera» ha sido rodada en Lituania y ha utilizado movimientos de cámara diseñados para dar libertad al actor, con acentuadas dosis de improvisación. «Hay partes de la película como en la escena de las salas de confidencias que han sido totalmente improvisadas», ha afirmado el director. Este método ha satisfecho a la actriz Ariadna Gil, que encarna el papel de madre y que ha estado hoy en Sitges junto gran parte de los intérpretes, para presentar la película.
El otro título catalán de la jornada es el de «Asmodexia», la ópera prima de Marc Carreté, una propuesta de posesiones diabolicas con una tonalidad muy personal que narra la historia del sacerdote Eloy de Palma y su nieta Alba, que recorren las afueras de Barcelona por tal de encontrar los poseídos por un al que asedia la ciudad y que sólo Alba tiene el poder de expulsar.
Sergio Caballero, director de «La distancia», ha ofrecido hoy una master class a partir de la proyección de su película de terror «Ancha es Castilla / N’importe quoi», un mediometraje que también habla de posesiones y de una niña con capacidades para practicar exorcismos.
