Compañeros de profesión le han acompañado sobre el escenario del Teatro Zorrilla y han destacado su «humanidad» y «lealtad»

La Gala del Cine de Castilla y León ha rendido homenaje al director Antonio Giménez-Rico con la Espiga de Honor por toda una vida dedicada al séptimo arte. El cineasta burgalés ha estado arropado en el Teatro Zorrilla por compañeros de profesión. «Para mí es un honor estar rodeado de actores, actrices y por el mejor director de fotografía del mundo, José Luis Alcaine», ha destacado.

En el escenario, a su lado, han querido estar presentes los actores Iñaki Miramón, Juan Jesús Valverde, Mónica Randall, Joaquín Hinojosa y Lydia Bosch. Estos dos últimos formaron parte del reparto de la película «Jarrapellejos» (1988) que cumple 30 años y se ha podido ver durante el acto en el Zorrilla.

Aunque la cinta nunca había estado en Seminci, sí tiene una especial vinculación con la ciudad. «Descubrí esta novela de Felipe Trigo en Valladolid cuando yo estudiaba Derecho en una librería de viejo a finales de los años 60. Estaba buscando novelas prohibidas y me la recomendó el librero, la leí y me pareció imposible llevarla al cine. Me parecía muy compleja», ha señalado. No sería hasta años más tarde, con varios proyectos ya a sus espaldas y tras rodar «El disputado voto del señor Cayo» (1986). «Los productores me preguntaron qué quería hacer al finalizar ese rodaje y dije: es el momento», ha confesado. Ahí nació «Jarrapellejos».

Giménez-Rico también quiso recordar el papel fundamental de su amigo el director Manuel Gutiérrez Aragón en este filme. «Terminé el guion, pero no me gustaba el arranque porque me parecía que tardaba en presentar a los personajes. Manuel lo leyó y se le ocurrió la primera escena y ya de ahí la película rodaba sola», ha manifestado.

Todos los actores que le han acompañado en la recogida de la Espiga de Honor, entregada por la directora general de Políticas Culturales de la Junta de Castilla y León, Mar Sancho, han destacado su «humanidad», su «lealtad» y la «libertad» que concede para trabajar sus papeles.

«Castilla y León y toda España deberían estar agradecidos de tener un cineasta como Giménez-Rico», ha afirmado el actor Juan Jesús Valverde. «Es grande como director, como persona y como amigo. Él fue quien me descubrió. Es una persona que se hace querer y se merecería mucho más», ha indicado Miramón. También Lydia Bosch ha confesado que gracias al cineasta burgalés se dedica al cine.