Un año más, el cine iraní se impone sobre el resto de producciones. «No Bears», del director iraní Fajar Panahi, ha elevado, y de qué manera, el nivel de la competición en el Festival de Valladolid. El cineasta iraní, condenado a siete años de cárcel por el régimen de los ayatolás, siempre se las ha sabido apañar para seguir rodando, bien desde sus arrestos domiciliarios, bien desde la cárcel, y «No Bears» no es una excepción,

Su película son dos historias de amor, las dos imposibles, superpuestas. La primera de ellas se desarrolla en un documental que un director de cine encarnado por el propio Panahi rueda desde la distancia a través de las redes sociales. Éste se encuentra en un pueblo de la frontera entre Irán y Turquía y vía internet da las órdenes a su equipo de Estambul sobre cuestiones tales como el ritmo, la forma y hasta el sentido del argumento. Recuérdese se trata de un documento, que no ficción, de una pareja que pretende desde Turquía escapar hacia la Europa. La otra se sitúa en el mismo pueblo en el que el personaje de Panahi se ve recluido. La ruptura de una boda pactada enfrenta a los enamorados con las tradiciones de la comunidad. Y una posible foto accidental del director es el centro de todas las disputas. Por supuesto el filme toca muchísimos otros temas, el cine en el cine, la represión casi imperceptible, de los miedos inventados, de las relaciones entre personas, de las buenas gentes de Irán frente a la ferocidad y represión del poder…

La película, que rodada antes de su última condena, y que fue aclamada en el Festival de Venecia, está llena de giros de guion y de sorprendentes sorpresas narrativas. El propio Panahi se interpreta a sí mismo. Como en otras películas del cineasta, Panahi plantea una reflexión entre las diferencias y similitudes entre la vida en el Irán cosmopolita y el rural, y además, desarrolla el paralelismo entre el fundamentalismo del gobierno y el conjunto de tradiciones y leyes atávicas que rigen en la frontera turco-iraní.

Una excelente película destinada a entender mejor lo que sucede en Irán.