Sus colegas la premian por la dirección de «En tierra hostil»
La directora de «Le llaman Bodhi» y la apocalíptica «Días extraños» vive un momento inigualable en su carrera. Su drama bélico «En tierra hostil», ubicado en Irak pero rodado en Jordania, le ha valido los más prestigiosos premios cinematográficos, en dura riña con su ex marido, James Cameron y «Avatar», la película más taquillera de todos los tiempos, seguida de «Titanic», destronada 12 años después de su realización…por el propio Cameron.
«Es el momento más increíble de mi vida», dijo ayer Bigelow al recoger el premio. «Me siento aturdida y honrada», dijo, enfundada en un ceñido vestido negro sin mangas y con su característica melena larga. Los eternos vaqueros, quedaron relegados al fondo del armario. En la ceremonia de los Globos de Oro de enero, cuando el del mejor director fue a parar a James Cameron, él confesó en el discurso de agradecimiento: «pensé que lo ganaría Kathryn, lo merece mucho más que yo». Al finalizar la gala, la ex pareja y Suzie Amis, la quinta esposa del «barba azul» canadiense, se fotografiaron juntos. Cameron conoció a Amis en el plató del «Titanic». Ella interpretaba a la nieta de la protagonista Rose DeWitt y el estaba casado con Linda Hamilton, la madre coraje de «Terminator». El divorcio fue un escándalo.
No así el de los héroes de la temporada. Bigelow y Cameron estuvieron brevemente casados, habiéndose unido en 1989. El era ya el director de éxito de «Terminator» y «Aliens». Ella solo había realizado una memorable de vampiros motorizados, «Los viajeros de la noche» y la fetichista «Acero azul» con Jamie Lee Curtis. Ella fue su tercera mujer y se divorciaron en 2001. Sin embargo, el continuó apoyándole para encontrar financiación en sus posteriores filmes y coescribió la anticipada «Días extraños».
Bigelow continúa siendo una mujer independiente e intocable. La excepción: el francés Luc Besson, un amante que le robó el proyecto sobre Juana de Arco, que Bigelow planeaba rodar en Extremadura, hasta el punto de haber realizado localizaciones en la tierra de los conquistadores. Besson fracasó al servirle un chusco vehículo a su mujer de entonces, Milla Jovovich, una bellísima cantante con cero talento interpretativo.

«En tierra hostil» está protagonizada por Jeremy Renner, y realizan «cameos» de lujo, Guy Pearce, David Morse y Ralph Fiennes, quien fuera su protagonista en la visionaria «Días extraños» como el incurable romántico Lenny Nero. El film ganó, la noche anterior a los Globos de Oro, dos premios del Círculo de Críticos norteamericanos, mejor película y director. Está nominada para los BAFTA británicos y se espera que el 7 de marzo riña la batalla final contra «Avatar» por los Oscares. Mientras tanto, sus pares de Hollywood la han coronado la mejor directora de 2009.
Por «En tierra hostil, Bigelow también ha recogido los siguientes galardones del más alto rango: El Círculo de Críticos de Nueva York, el de Los Angeles y el de la National Society of Film Critics. Los productores estadounidenses le otrrgaron su máximo premio, el Darryl F. Zanuck a la mejor producción del poasado año. Los filmes candidatos a los Oscares serán presentados por Anne Hathaway el próximo martes 2 de febrero y se entregarán el domingo, 7 de marzo en el teatro Kodak de Hollywood, con elefantes de Griffith incluídos. Maestros de ceremonias: Alec Baldwin y Steve Martin.
Hollywood ha olvidado sus dos más flojas películas, «K19: The Widowmaker», con Liam Neeson y Harrison Ford con falsos acentos rusos, y «El peso del agua», su única película de época, con Sarah Polley, Sean Penn, Josh Lucas y Elizabeth Hurley. De esta directora, cuya película favorita de todos los tiempos es «Grupo salvaje», de Sam Peckimpah, y que admira a Juana de Arco, porque como la santa quemada en la hoguera le gusta jugar con fuego, se espera aún mucho más. Ya dejó escrito el gran Cabrera Infante: «las películas de Kathryn Bigelow son enormes lienzos pintados con fuego y sangre». Cabrera Infante dixit, causa finita.