LA CRISIS IMPIDE AL CINEASTA CONVERTIR LA HISTORIA AMBIENTADA EN LA GRECIA CLÁSICA EN PELÍCULA

Julio Medem ha convertido «Aspasia», la historia que ha intentado rodar durante años sin conseguirlo, en una novela, que ha presentado este martes. «Aspasia. Amante de Atenas» es así una novela que desvela la vida de uno de los personajes más influyentes y menos conocidos de la Grecia clásica, la amante de Pericles.

Medem se estrena como novelista con esta publicación que se divide en seis libros. De la vida de Aspasia previa a su llegada a Atenas se conoce solo que nació en Mileto y el nombre de su padre. Por ello, Medem ficciona esta etapa de su vida, donde la propia protagonista narra su existencia desde los diez años, para dar sentido a la sabiduría que conquistó a los hombres que conoció.
La vida de Aspasia está en primera persona. «Me he sentido muy a gusto dentro de la psicología femenina, mi perspectiva se ha enriquecido muchísimo», explica el cineasta, que ha elegido el antiguo sistema de contar por «rollos», es decir, un «libro» de la historia cada cien páginas y desde la voz de la propia Aspasia, desde que es una niña de diez años, cautivada por los recuerdos de su padre de la batalla de Maratón, hasta el momento de la muerte de su esposo.
«Ella vive en la Atenas democrática de Perícles, en época de paz, donde surge Herodoto, donde ocurre el teatro: Eurípides, Sófocles, Esquilo. También es el momento de Fidias, de Anaxágoras, del orden dórico, el Partenón… hay una gran cantidad de personajes sabios entre los que aparece esta mujer, que también es sabia», apunta Medem. Además de su idilio con Pericles, también fue amiga de Sócrates, Platón, e incluso Plutarco dijo de ella que «era capaz de dirigir a su antojo a los principales hombres del estado y ofrecía a los filósofos la ocasión de discutir con ella en términos exaltados durante mucho tiempo».
Julio Medem no puede evitar pensar en lo que costaría rodar esta historia, pero no descarta poder convertirla en película algún dia: «No sé qué va a pasar, no descarto nada», señala el cineasta, quien matiza que «es mucho mejor la novela que el guión».