El director donistiarra clausura el certamen con «Habitación en Roma», su más reciente película
En el transcurso de una gala especial que se ha celebrado en la noche de este viernes en el Teatro Cervantes, el director ha recibido el Premio Retrospectiva del Festival de Málaga. El acto ha estado presentado por dos de los actores más carismáticos del director, Emma Suiárez y Fele Martínez, y ha congregado en el escenario a algunos de sus amigos: los productores Koldo Zuazua y Enrique López Lavigne y los actores Tristan Ulloa, Ana Torrent, Manuela Velles, Elena Anaya y Natasha Yarovenko.
Julio Medem ha considerado desde el escenario que este Premio Retrospectiva es «un estímulo para empezar una segunda etapa» en su carrera. Emma Suárez ha recordado como Medem robaba de pequeño a su padre la cámara de Súper 8 por las noches para hacer «fechorías fílmicas». La actriz ha definido el estilo del director como «inconfundible, arriesgado y comprometido» y le ha considerado como «uno de los más originales creadores cinematográficos del país». Pero antes de entrar en el cine, fue atleta y se licenció en Medicina. «Es como una navaja suiza», ha añadido Fele Martínez, asegurando que su carrera de medicina ha sido importante porque «es capaz de diseccionar la mente del actor, sacarle las entrañas y meterlas dentro otra vez para ponerlo a rodar».
Medem ha desvelado que planea mudarse a Los Ángeles un año para escribir «un best-seller», una novela griega sobre hace 25 siglos. «De adolescente había un escritor en mí que me ha ayudado a hacer cine y ahora le voy a ayudar a escribir». La novela, según dijo, será el sustrato de un proyecto ‘multimedia’ mucho mayor sobre Pericles y Aspasia, el proyecto que tiene entre manos desde hace dos años.
El Festival ha elegido la nueva película de Medem para clausurar el certamen este sábado 24. «Habitación en Roma», rodada en inglés, está protagonizada por Elena Anaya y Natasha Yarovenko, que dan vida a una española y una rusa que mantienen una intensa relación sexual y emocional durante una noche en un hotel de Roma. La película se inspira lejanamente en la cinta chilena «En la cama», de Matías Brize.