«Dirty Dancing», película de 1987 dirigida por el desaparecido Emile Ardolino, con Jennifer Grey y también desaparecido Patrick Swayze, es hoy una película de culto. Una historia de amor adolescente con la que muchos jóvenes de la época pudieron identificarse, con música y bailes, que en España llegó a través del desaparecido Festival de Cine y Música de Cuenca, donde se alzó con el primer premio. Después lograría el Oscar a la mejor canción original, «(I’ve Had) The Time of My Life». Pronto llegaron secuelas, una versión teatral y hasta una serie de televisión, que nada tenían que ver con la película original, acabaron con la fórmula. Ahora se anuncia una secuela que protagonizará Jennifer Grey que promete regresar al universo primitivo, aunque la actriz ya roce los 60 años.

La actriz ha confirmado que la secuela «ya es un hecho» y ha apuntado que se desarrollará en el mismo complejo turístico ficticio, llamado Kellerman’s, en el que se escenificó la historia original. Según la actriz, «podremos ver a una Baby bastante años mayor y también aparecerán otros personajes del filme original».

Grey asegura que elaborar la secuela de «Dirty Dancing», ha sido complicado y a la vez emocionante, pero no habla de si existirá o no el rol de Johnny Castle, su pareja en la película original y que fue interpretado entonces por el actor Patrick Swayze, fallecido de un cáncer de páncreas.

Pese a lo que mostraba aquella película, Jennifer Grey no soportaba a Patrick Swayze: «Llegaba tarde y creyéndose el jefe de todo», ha dicho. Se sabe que esta secuela se comenzará a rodar en la próxima primavera, incluirá canciones de la original y hip hop de los 90, y estará dirigida Jonathan Levine.