El actor ha estado recorriendo Los Angeles con policías locales para «End of Watch» («El final de la guardia») durante cinco meses
Robert De Niro fue un memorable Jake La Motta para el «Toro salvaje» de Martin Scorsese. Puso en peligro su vida engordando lo indecible. Lo mismo hizo Benicio del Toro para «Miedo y asco en Las Vegas», de Terry Gilliam, y se ganó la bronca de su nutricionista. Sin llegar a esos extremos físicos, Jake Gyllenhaal ha estado apatrullando Los Angeles con oficiales locales de la policía para «End of Watch» («El final de la guardia») durante nada menos que cinco meses. Su papel, naturalmente el de un policía, Brian Taylor.
Presentándola en el recién clausurado Festival Internacional de Cine de Toronto, Jake Gyllenhaal ha señalado que no habían estado impresionados por su estatus de estrella, considerándole un colega más.
Ha dicho: «Estuvieron escépticos de la experiencia y me llevó un tiempo hacer amistad con ellos». El hermano de Maggie Gyllenhaal y cuñado de Peter Saarsgard, y tío de Ramona y Gloria Ray Saarsgard, a sus 31 años, la ha estrenado este lunes, y en el reparto, Michael Peña («World Trade Center»). Añade: «Seriamente, se tenían que ocupar del ciudadano que llevaban en el asiento trasero y debí de ser una carga».
La película ha sido recbida con excelentes críticas. Sobre todo porque los personajes de Gyllenhaal y Peña, de 36 años, son dos policías unidos en las muy peligrosas calles del barrio angelino de South Central. Lo mejor de estos «ensayos» fue que no fueron reconocidos y actuaron con plena libertad. Incluso fueron testigos del enfrentamiento a tiros con unapeligroso cartel local. Dirigida por David Ayer, el reparto cuenta con la deliciosa Anna Kendrick («Up in the Air») y America Ferrera.
El problema se generó cuando fotógrafos acudieron al lugar del incidente y los actores fueron fotografiados. Eso incomodó a los oficiales. Peña confesó haberse sentido muchas noches un oficial policíaco real y pensó que quizá hubiera podido unirse al cuerpo de la LAPD. Sin embargo, Jake descubrió que jamás podría hacerlo. Y eso que ha rodado filmes tan perturbadores como «Donnie Darko», con su hermana, «Los crímenes del Zodíaco», «Source Code, «Brothers» y sobre todo, «Jarhead».