El cine español está de luto al perder a una sus actrices más icónicas. Marisa Paredes ha fallecido en Madrid a los 78 años, dejando tras de sí una larga carrera en la que el público ha podido verla en más de 75 ocasiones en la gran pantalla, con una trayectoria igualmente destacada en teatro y televisión. Especializada en mujeres fuertes, ambivalentes, pasionales, enigmáticas y en definitiva muy humanas, han conformado el trabajo interpretativo de la madrileña, que deja pendiente de estreno la película «Emergency Exit» de Lluís Miñarro.

Marisa Paredes, nació en Madrid el 3 de abril de 1946 muy cerca del Teatro Español. Su madre era portera de su casa. De niña veía pasar a los actores y fabulaba con aquella vida de farándula mientras subía por las escaleras cubos de agua que llenaba en la fuente para que su madre fregara las escaleras. Desde niña mostraba una gran vocación por el teatro. Cuando le dijo a su padre que quería ser actriz, éste bramó: «Pero la niña ¿qué se ha creído, que es Lola Flores?». En 1960 (a los catorce años de edad) debutó en cine con «091 Policía al habla», de José María Forqué. Al año siguiente debutó en teatro. Actuó con la compañía de Conchita Montes como meritoria, en la obra de José López Rubio «Esta noche tampoco». Pero el hombre que la abrió a la vida fue Fernando Fernán Gómez. Cuando le conoció tenía 16 años, hacía sólo uno que había debutado en la compañía de Conchita Montes. Él ya rondaba los 30 y era un actor e intelectual reconocido. La deslumbró. «Fue un maestro de vida. Representaba lo más fascinante que podía tener una persona: inteligencia, cultura, sentido del humor, lucidez…». La actriz interviene en la película «Y el mundo sigue», de Fernán Gómez.

Paredes se formó en la Escuela de Arte Dramático de la capital, Durante los sesenta y los setenta trabajó mucho en Televisión Española, en espacios dramáticos como el mítico «Estudio 1». En el cine suma papeles secundarios y con la llegada de los años ochenta y «Ópera prima», de Fernando Trueba, llega su consolidación. En 1983 llega su primera colaboración con Pedro Almodóvar, cineasta al que estará perpetuamente unida en la historia del cine, con «Entre tinieblas». Después rodará con el manchego sus grandes protagonistas: será la diva Becky del Páramo en «Tacones lejanos» y la escritora Amanda Gris de «La flor de mi secreto», papel este último por el que recibió una nominación al Goya. También aparecerá en «Todo sobre mi madre», «Hable con ella» y «La piel que habito».

Casada con el director de cine Antonio Isasi-Isasmendi, al que conoció con 27 años en el famoso Boccaccio de Madrid, lugar de reunión de la farándula en los finales 60 y 70, nació en 1975 su única hija, la también actriz María Isasi. La actriz se separó poco después para iniciar en 1983 una relación con Chema Prado (su segundo marido) que durante muchos años fue director de la Filmoteca Española.

Sus colaboraciones con Almodóvar la abrirán al cine internacional, en el que participa en cintas como «La vida es bella», de Roberto Benigni, «Profundo Carmesí», de Arturo Ripstein, o «El espinazo del «de Guillermo del Toro. También sumará a su filmografía trabajos con ditectores como Amos Gitai («Golem, l’esprit de l’ exil»), Daniel Schmid («Hors saison»), Philipe Lioret («En tránsito»), Raoul Ruiz («Tres vidas y una sola muerte», donde comparte plantel con Marcello Mastroianni), Alain Tanner («Jonás y Lila»), Maria Sole Tognazzi («L’uomo che ama»), Cristina Comencini («Mi familia italiana») o Manoel de Oliveira («Espelho mágico»).

Desde el 2000 hasta el 2003 Marisa Paredes fue Presidenta de la Academia de Cine, institución que la reconoció en 2018 con el Goya de Honor. Hace pocos os meses, la actriz participó en la Memoria Colectiva del Cine Español con una entrevista en profundidad sobre su carrera.