El actor y director teatral Ricardo Moya ha fallecido en su ciudad natal de Santander este 28 de diciembre a los 67 años. El intérprete y profesor trabajó a las órdenes de los grandes directores de escena de este país durante cuatro décadas y fue cofundador de la Escuela de Teatro del Palacio.

Moya se licenció en Arte Dramático en el Institut del Teatre de Barcelona, y paseó su sólida profesionalidad por los más diversos autores, desde clásicos grecolatinos hasta rabiosamente contemporáneos, entre los que destacaron Buero Vallejo, Camus, Harold Pinter (muchas veces como actor y director), Eurípides, O’Neil, Esquilo, Bertolt Brecht, Wedekind, Valle-Inclán, Juan Villoro, Carlos Gil, Albert Boadella, Sacha Guitry, Jean Genet, Palau i Fabre, José Ramón Fernández, Dürrenmatt, Sófocles, Lope de Vega, Pomerance, Muñoz Seca, Max Aub, La Fura dels Baus y Sopena, entre otros muchos.

Entre sus montajes más destacados se encontraban «Pasión», en la población de Potse con ochenta actores, «Tango por ciento», con Constantino Romero, y «El Rufián en la escalera», de Joe Orton. Logró importantes reconocimientos también en su tarea de director, como en «Viejos tiempos», de Harold Pinter estrenada en el Teatro Español con Ariadna Gil, Emma Suárez y José Luis García Pérez.

En cine trabajó con Felix Roteta y participó en series televisivas como «Cuéntame», «La embajada», «Desaparecida», «Isabel», «El comisario», «El cor de la ciutat», «De moda», «Psicoexpres», «Aladina», «Andorra», «Locos de atar» o «Ambiciones y Vidas», entre otras. En cine destacan sus apariciones en «La mitad del cielo» (1986), de Manuel Gutiérrez Aragón, «Las razones de mis amigos» (2000) , de Gerardo Herrero, o «A+» (2004), de Xabier Ribera.