Al margen de sus éxitos musicales fue actor en el musical «Jesucristo Superstar» y en dos películas argentinas de Adolfo Aristarain junto a Ricardo Darín
El cantante y actor, que vendió más de 70 millones de copias durante su carrera, ha fallecido en Madrid este domingo 8 de septiembre por un fallo renal. En 1975 protagonizó en Madrid la ópera rock «Jesucristo Superstar», en el que daba vida a Jesús y en el que estaba acompañado por Ángela Carrasco como María Magdalena y Teddy Bautista como Judas. El primer gran musical representado en España, un hito social y político en el final del franquismo, lo convirtió en leyenda.
En 1984 trabajó en la película «El clavo de oro», dirigida por Antonio del Real, pero antes ya había trabajado en el cine argentino de la mano de Adolfo Aristarain, junto a Ricardo Darín.
El año en que… Por Boquerini (Publicado en La Butaca de las webs de los diarios regionales de Vocento en noviembre de 2018)
Ricardo Darín y Camilo Sesto se encontraron en Argentina haciendo cine
Los rodajes cinematográficos convierten en compañeros a los personajes más insospechados. Esto sucedió con Ricardo Darín y el cantante Camilo Sesto, no en una sino en dos películas argentinas, ‘La playa del amor’ (1979) y ‘La discoteca del amor’ (1980), ambas dirigidas por el que poco tiempo después se convertiría en el muy prestigioso director Adolfo Aristarain. Ninguna se llegó a estrenar comercialmente en España, pero se proyectaron, para pasmo de los espectadores, en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva de 2002, donde Aristarain recibía el Premio Ciudad de Huelva.
Ambas películas formaban parte de una serie comedias realizadas durante la dictadura argentina, todas acomodaticias e intrascendentes (en realidad no se podía rodar otra cosa), todas con el común denominador de ‘amor’ en su título, y todas con Darín en su reparto. Fueron ‘Los éxitos del amor’ (Fernando Siro, 1979), ‘La carpa del amor’ (Julio Porter, 1979), ‘La playa del amor’ (Adolfo Aristaraín, 1980) (en ambas estaba el desaparecido cantante español Manolo Galván, líder del grupo ‘Los Gritos’) y ‘La discoteca del amor’ (Adolfo Aristarain, 1980), está dos últimas con Camilo Sesto en su reparto, y ‘La discoteca…’, la más famosa, también con Ángela Carrasco. En ninguna tienen papeles protagonistas, pero con el paso del tiempo, se han convertido en los intérpretes más destacados.
Ricardo Darín (Buenos Aires, 1957) es hijo de actores, por lo que pisó platós y escenarios desde muy pequeño. Con tres años apareció en la serie televisiva argentina ‘Soledad Monsalvo’, aunque el actor considera su verdadero debut cuando, con diez años, debutó en teatro junto a sus padres. A los dieciséis años consigue estabilidad dentro del mundo de la televisión argentina, logrando una popularidad considerable al ser protagonista en varias de sus producciones. Trabaja por primera vez en un largometraje en ‘La culpa’ (1969), para seguir con ‘He nacido en la Rivera’ (1977), ‘Así es la vida’ o ‘La nueva cigarra’ (ambas de 1979.
En aquellos años, Darín salta definitivamente a la fama como parte de los ‘galancitos’, un grupo de jóvenes actores que trasladaron éxitos televisivos al mundo del teatro. Los ‘galancitos’ cosechan una fama increíble y miles de seguidores se reparten por toda Argentina, haciendo de cada representación un completo éxito. Es entonces cuando hace ‘Los éxitos del amor’, ‘La carpa del amor’, ‘La playa del amor’ o ‘La discoteca del amor’, nunca como gran protagonista, pero cuyo éxito provoca que Darín inicie un lento pero paulatino cambio de registro hacia el actor que conocemos ahora.
Camilo Sesto (Camilo Blanes Cortés (Alcoy, Alicante, 1946), dio sus primeros pasos como cantante en el coro de su colegio en Alcoy, pero no comenzó a interesarse realmente por la música hasta los 16 años. Desde mediados de los 60 Camilo Sesto (entonces aún Camilo Blanes) forma parte del grupo pop Los Dayson, con el que canta en bodas y bautizos por su comarca natal Alcoy interpretando canciones de The Beatles, los Bee Gees, el Dúo Dinámico asi como alguna propia. En 1965 participa en el famoso concurso de TVE ‘Salto a la fama’, logrando convertirse en el cantante del grupo Los Botines. Con ellos debuta en el cine con una adaptación de ‘El flautista de Hamelín’, protagonizada por el cantante Miguel Ríos’. Sin embargo su primara gran interpretación en el cine fue en 1967 como Lolo, uno de ‘Los chicos del preu’ en la película del mismo título de Pedro Lazaga. En la que, con una guitarra en la mano exclamaba la profética frase: «Con esta la voy a armar, seré famoso, grabaré discos que se venderán por millones».
Ya como un cantante de éxito, El 6 de noviembre de 1975 Camilo comenzó a protagonizar la Ópera rock ‘Jesucristo Superstar’ en el Teatro Alcalá-Palace de Madrid, interpretando a Jesús de Nazareth. También la produjo, costeándola en su totalidad. El proyecto resultaba sumamente complejo y caro, por lo que se dudaba acerca de su viabilidad. Pero una vez en marcha, las funciones se prolongaron por cuatro meses con un gran éxito de público. En el elenco estaba Ángela Carrasco dando vida a María Magdalena. A finales de los 70, en una gira, visita Argentina junto a Ángela Carrasco. Su presencia es aprovechada para ser incluido en el reparto de ‘La playa del amor’, y junto a Ángela en ‘La discoteca del amor’, ya que sus canciones habían formado parte de la banda sonora tanto de ‘Los éxitos del amor’ como de ‘La carpa del amor’. De esta manera Camilo Sesto se encuentra interpretándose a sí mismo en dos películas, sin que se pudiese imaginar que uno de sus compañeros de reparto se iba a convertir en el mundialmente famoso Ricardo Darín.
Adolfo Aristarain (Buenos Aires, 1943) se interesa por el cine desde muy joven donde llega a trabajar como extra. Para ascender pronto a ayudante de dirección. Unos años de exilio en Europa la permiten convertirse en ayudante de directores como Sergio Leone, Mario Camus o Vicente Aranda, para regresar a su país en 1978 y debutar como director co ‘La parte del león’. La censura le impide hacer el cine que quiere por lo que acepta dirigir una serie de musicales y comedias livianas como ‘La playa del amor’ o ‘La discoteca del amor’, que le dan suficiente dinero para realizar en 1981, una vez desaparecida la dictadura del general Videla, ‘Los últimos días de la víctima’, con Federico Luppi como un parapolicial, que se convierte en un enorme éxito y significa su despegue como director.
La playa del amor (1979)
El musical presenta a Cacho (Cacho Castaña) quien está preocupado porque su hermano menor, Ricardo (Ricardo Darín), quiere casarse a toda costa. Cacho y su amigo Antonio (Carlo del Burgo) le convencen para que no lo haga, lo llevan a la playa y le presentan a otras chicas para que se olvide de su novia. Allí están filmando un musical para la televisión, Ricardo reconoce que es muy joven para casarse y acepta el juego propuesto por su hermano. Pero en media de canciones y fiestas, Cacho y Antonio conocerán a dos chicas a las que les propondrán matrimonio.
La discoteca del amor (1980)
Los directivos de una compañía discográfica descubren que sus canciones son pirateadas por lo que para poner fin al delito se plantean encontrar a los culpables. Para ello contratan a un detective, que con su ayudante (Ricardo Darín) sale a la búsqueda de la banda de delincuentes involucrada en el delito.
