Este pasado 16 de marzo fue hallado el cuerpo inconsciente de Paul Grant en la estación King’s Cross de Londres. Fue trasladado al hospital, donde le diagnosticaron muerte cerebral y más tarde, el domingo 19, procedieron a desconectarle. Grant era un intérprete de pocas pero memorables apariciones en el cine. Su hija, Sophie Jayne, ya ha reaccionado al fallecimiento: “Tengo el corazón roto… ninguna chica merece que se lleven a su padre”.

De forma similar se ha manifestado Marie Dwyer, la novia de Grant: “Paul era el amor de mi vida, el hombre más divertido que conozco. Hizo que mi vida fuera completa”. Grant tenía 56 años, y sus principales papeles se habían dado en la década de los 80. En 1983, concretamente, fue elegido para interpretar a uno de los Ewoks de Star Wars: «El retorno del Jedi».

Más tarde, en esa misma década, hizo aparición en «Dentro del laberinto» y pudo intervenir, por fin sin disfraces de ningún tipo, en «Dublineses». Años después, en el 2000, fue elegido como uno de los duendes de Gringotts, banco de los magos, con quienes Daniel Radcliffe se topaba al inicio de «Harry Potter y la piedra filosofal».