Conocido por sus imágenes de adolescentes desnudas en la década de los 70, dirigió películas como «Bilitis» o «Tiernas primas»

El fotógrafo de moda británico y cineasta David Hamilton ha muerto a los 83 años en París. Las primeras hipótesis apuntan a un suicidio. Hamilton, conocido por sus imágenes de adolescentes desnudas llenas de flou en la década de los 70, estuvo en el foco de la polémica recientemente después de que una animadora de radio y televisión francesa, Flavie Flament, contara en unas memorias que había sido violada a los 13 años y se sospechara de él.

Aunque Flament no difundió su nombre en esa autobiografía, titulada «La Consolation» («El Consuelo»), dio información suficiente como para poder identificarle, recordó este viernes 25 la emisora «Europe 1». «No soy el autor de los comportamientos criminales que se me achacan», señaló el fotógrafo el pasado 26 de octubre, en un comunicado en el que dijo estar «particularmente indignado por la ausencia total de respeto» de su presunción de inocencia.

Su muerte, según la prensa, fue registrada hacia las 21.30 horas del viernes 25 de febrero. El cuerpo fue encontrado en parada cardiorrespiratoria, con medicamentos cerca de él.Hamilton nació en Londres el 15 de abril de 1933 y era conocido por retratos en los que predominaban los colores suaves y las atmósferas difuminadas.

Además de fotógrafo, David Hamilton dirigió un puñado de películas con el mismo flou que sus fotografías, cntrándose también en las adolescentes: «Bilitis» (1977), «Sublime Frenesí» (1979), «Tendres cousines» («Tiernas primas», 1980), «Un verano en Saint-Tropez» (1983), o «Primeris deseos» (1984).

Antes que fotógrafo y director de cine, David Hamilton (Londres, 15 de abril de 1933) se dedicó a quehaceres distintos de la fotografía pero relacionados con la estética: fue decorador de tiendas, director artístico en revistas como Elle y Queen, asistente artístico de la cadena de almacenes Printemps. El detonador de su carrera ocurrió en 1967, a la edad de 34 años, cuando fotografió por primera vez una de sus muchachas, en su casa de Ramatuelle (Provenza), las fotografías fueron publicadas en Jasmin y después en Twen, publicación alemana. En 1969 ya era el David Hamilton que hoy se reconoce en el medio artístico. En cada año ha inaugurado personalmente exposiciones de su obra en países como Japón, Italia, Alemania y Estados Unidos. Poseía un estilo característico en el que suelen predominar los colores suaves, atmósferas difuminadas y el grano grueso, que acabó llamándose hamiltoniano. Tuvo un tipo muy definido de modelo: iniciara la adolescencia (hacia los 11 años) o fuera plena adolescente o hubiera salido ya de la adolescencia, su modelo debía transmitir perfección, elegancia innata, naturalidad, inocencia y sutil erotismo. Como señalaron en Woman by 10 «El talento de David Hamilton consiste en su habilidad para sorprender a las jóvenes exactamente en el momento en que descubren la mejor parte de su erotismo ingenuo…»; esto lo llevó a escoger casi invariablemente un tipo de joven: «el artista recurre siempre al mismo tipo de muchacha escandinava que conserva intacta durante mucho más tiempo esta etapa fugaz de la existencia», se mantuvo alejado de las agencias de modelos y evadió muchas veces las sugeridas de amigos o padres.