Xavier Martínez Soler dirige un filme que interrelaciona ficción y realidad
Protagonizada por Pablo Rosal, Rosa Serra Torrens, Oriol Genís, María Pau Pigem, Xavier Pujolràs, Marcel Ribera y Jose Luis Aguirre, Xavier Martínez Soler ha finalizado el rodaje del drama experimental de bajo presupuesto «un trabajo y una película».
Escrita por Xavier Martínez Soler y Pablo Rosal, la película se inicia cuando, en una nave industrial abandonada, un vigilante observa la realidad desde una soledad e intimidad imperturbables, rayando el linde de lo humano. Pero en esta nave ha ido a parar una película, una cámara, la mirada del espectador. Ambos se encuentran: el vigilante con la posibilidad de hacer arte, mito de su vida; y la cámara con un protagonista, algo que filmar. Así empieza una relación simbiótica en la que el uno descubre las posibilidades del otro, una situación que tiende a convertirse en una película, una ficción, si se quiere, donde el vigilante, protagonista absoluto, se verá asfixiado por su propia historia.
«Un trabajo y una película» se ha rodado durante 9 semanas en localizaciones de Cataluña, Aragón y Menorca con un presupuesto que no ha sobrepasado los 200.000 euros.
«Es un arrebato fílmico para liberar a la imagen de la esclavitud a la que vive sometida por tener que representar al mundo una y otra vez según intereses humanos. Con este film se devuelve el poder a la imagen para que ella misma articule una nueva mirada hacia el mundo, su propio discurso, una autonomía que le ha sido arrebatada por el abuso que recibe al tener que estar al servicio de cualquier manifestación visual pretendida por lo humano. Así es como el cine, morada de la imagen, encontrará su mayor virtud: desvelar el lenguaje que hay en el cruce de miradas entre la película y el espectador para entender mejor las obsesiones que nos acechan a diario”, dice el director Xavier Martínez Soler.
