En la última jornada antes de que el Jurado Oficial haga su deliberación, Sitges se prepara para dar sus últimos coletazos. Este viernes 14 el certamen ha recibido una de las visitas que más expectación ha generado de toda la edición. De femme fatale a madre coraje, pasando por sus tenebrosos papeles en las películas de Tim Burton, o sus trabajos más independientes a las órdenes de Gregg Araki o Roman Polanski, Eva Green ha logrado ganarse el cariño de los fans por su gran versatilidad y presencia escénica. Sitges la recibe con los brazos abiertos junto a Lorcan Finnegan, director de «Nocebo», que regresa a la costa catalana tras triunfar en el año 2019 con «Vivarium».

El cine nacional ha sido una de las columnas vertebrales de este Festival, y en su recta final presenta dos llamativos títulos estatales. Hoy ha sido el turno de «La niña de la comunión», la terrorífica cinta de Víctor García, cuyo tráiler se presentó en la edición del año pasado. Ya con la película completada, García ha visitado el Festival protagonizando una rueda de prensa en la que ha tenido ocasión de apuntar sus influencias a la hora de recuperar el mito de los años ochenta que da título al largometraje: “Las películas de James Wan son un referente para el cine de género actual y son las que más veces vi durante el proceso de producción, pero a la hora de empezar el rodaje, son de las primeras de las que me alejé. Ahora mismo hay unos referentes muy claros en torno al cine de terror con muñecas, como «Annabelle» o «Expediente Warren: El caso Enfield», pero también hay muchos referentes en los años 80”.

El otro protagonista del día ha sido Rodrigo Sorogoyen, que regresa a Sitges este año tras formar parte de la comitiva de la primera temporada de «Historias para no dormir» en la edición anterior. En esta ocasión, ha presentado su nueva película, «As bestas», un thriller rural basado en una historia real que maravilló a público y crítica en el pasado Festival de Cannes. La quinta película del director madrileño se ambienta en la Galicia profunda y explica la historia de una pareja de inmigrantes franceses que guardan una tensa relación con sus vecinos, una tensión que acaba por alcanzar cotas insospechadas. La película ha protagonizado el penúltimo pase del día en un Auditori abarrotado. Fuera de competición, el público de Sitges también disfrutado del estreno de «La exorcista», nuevo largometraje de Adrián García Bogliano y Elizabeth Avellan, que sigue la historia de una monja que ha de practicarle expulsar un demonio de una mujer embarazada.

En cuanto a la Sección Oficial a Competición, las dos últimas películas que el Jurado Oficial tendrá que valorar antes de su deliberación son «The Origin», debut en la dirección de Andrew Cumming, que sigue a un grupo de hombres primitivos que sospechan que una fuerza mística los persigue; y «The Stranger», en la que Thomas M. Wright cuenta la historia de un policía que finge una amistad con un sospechoso de asesinato para sacarle una confesión.

Pero, aunque los pases de competición oficial finalizaran a media mañana, el Festival todavía tenía más sorpresas que ofrecer en las secciones paralelas. Los licántropos de «Wolfkin», los fantasmas virtuales de «Social Distancing», el paisaje infernal de «The Harbinger» y la misteriosa figura de «Glorious» han aterrorizado a los fans del Festival dentro de la sección Panorama Fantàstic. Por su parte, Noves Visions ha cerrado su programa con la esperada «Pequeña flor», del reputado cineasta argentino Santiago Mitre. Antes de dar por concluida la sección, también han podido verse «Unidentfied Objects», una comedia con tintes de ciencia ficción dirigida por Juan Felipe Zuleta, y «Blaze», de Del Kathryn Barton, sobre el trauma catatónico de una joven tras presenciar un abuso sexual.